¿Cómo prevenir el delito? Es la pregunta que aqueja al país y a la que en el documento publicado por el Departamento Nacional de Planeación y el Centro de Estudios Sobre Seguridad y Drogas se le da una mirada, luego de conocerse que Colombia se ubica como el tercer país con mayor tasa de homicidios en América del Sur, según datos de la Oficina de las Naciones Unidas para las Drogas y el Delito (UNODC).
“Este documento lo escribimos porque lamentablemente en Colombi, el delito sigue teniendo unos altos costos sociales y económicos para el país: pérdida de vidas, disminución de la calidad de vida de los ciudadanos, pérdida de capital humano y de ingresos por encarcelamiento”, señaló Mateo Prada, asistente de investigación del Centro de Estudios Sobre Seguridad y Drogas (Cesed).
El delito ha sido por años el enemigo de la tranquilidad de millones de colombianos, por eso el documento remarca “que los países de América Latina y el Caribe incurren en un gasto promedio de 3,5 % del producto interno bruto (PIB) en estrategias contra el crimen; costos que se deben principalmente a la alta tasa de homicidios de la región, la cual cuenta con el mayor número de registros en el mundo. Durante 2017, cerca de 120.000 personas fallecieron a causa de la violencia en este territorio. En particular, de El Salvador, Venezuela, Brasil, Honduras, y Colombia son los países con las tasas de homicidios más alta de América Latina (Unodc, 2019). Para Colombia los costos son inferiores al promedio de la región, tal es el caso del año 2014, cuando el costo anual asociado al crimen representó el 3,12 % del PIB nacional (Inter-American Development Bank, 2017)”.
Allí agregan “que el país ha avanzado en la disminución de los costos asociados al crimen. En especial, ha logrado reducir su tasa de homicidios significativamente en las últimas décadas, así: a comienzos de los años 1990 el país presentaba una tasa de 80 por cada 100.000 habitantes, mientras que para 2019 se registró una tasa de 24 homicidios. Los logros pueden relacionarse con múltiples acontecimientos: la puesta en marcha de políticas de Estado contra la criminalidad y la delincuencia; la desarticulación de grupos al margen de la ley; un cambio de comportamiento por parte de los grupos ilegales, entre otros. Si bien los resultados son positivos, de acuerdo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, Colombia para 2030 debe disminuir la tasa de homicidios a 16,4 por cada 100.000 habitantes, razón por la cual el país enfrenta un reto significativo en los próximos años”.
Así mismo, de acuerdo con Lina González, directora de Justicia, Seguridad y Gobierno del Departamento Nacional de Planeación, “en el documento se presenta un set de estrategias efectivas entre las cuales se encuentran mejorar el espacio público, el desarme generalizado y la implementación de programas con jóvenes para el manejo de emociones, entre otras”,