Por cuenta de trinos y encuentros personales, el senador José Alfredo Gnecco, uno de los miembros del poderoso clan Gnecco del Cesar, liderado por la controvertida tía y baronesa política Cielo Gnecco, ha estado buscando acercamientos con el presidente Gustavo Petro y su carta de presentación es el apoyo que le ha dado a las reformas sociales que tramita el Gobierno en el Congreso.
Precisamente, el 25 de abril de 2024, el senador José Alfredo Gnecco y la baronesa Cielo Gnecco asistieron a una reunión con 25 alcaldes del Cesar y a la inauguración de un centro médico, financiado durante el gobierno del expresidente Iván Duque, en el corregimiento de Media luna, en jurisdicción del municipio de San Diego, Cesar, a donde llegó Petro.
Allí, hubo saludos con el Presidente y momentos de perdón y olvido, pues en 2020, cuando el mandatario era senador, consideró a los Gnecco corruptos y paramilitares, que se habían robado La Guajira, Cesar y Magdalena. En otra ocasión, el Pacto Histórico cuestionó a la exprimera dama Gnecco por burlar una orden de captura en su contra.
En esa ocasión, Cielo Gnecco se ubicó en primera fila, junto a su sobrino el senador José Alfredo Gnecco, a escasos metros del presidente Petro, quien estuvo en la tarima al lado del ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo y la gobernadora de Cesar, Elvia Milena Sanjuan. La baronesa y su sobrino fueron a saludar a Petro y el mandatario les correspondió el saludo comentaron otros asistentes.
La Gobernadora es cuota política de la familia Gnecco y aunque respaldó a Rodolfo Hernández, el contendor del candidato del Pacto Histórico, ahora es cercana al petrismo. En febrero pasado asistió a la cumbre de mandatarios regionales en la Presidencia de la República. Recientemente, también se reunió con el Ministro de Salud para hablar sobre los hospitales de Manaure, Codazzi, El Paso y Curumaní en torno a los cuales han organizado mesas de trabajo para lograr su aprobación.
En primera fila también estuvo el congresista Jorge Rodrigo Tovar, hijo del exparamilitar Jorge 40, con quien el Presidente tuvo un gesto protocolario y solo hubo apretón de manos.
Acercamientos a pasos agigantados de lado y lado para salvar reformas
Hoy, el clan Gnecco con su poder en La Guajira y Cesar se perfila como salvador de las reformas a la salud, laboral y pensional. Sus miembros asisten a cenas en la Casa de Nariño y cada vez se percibe a José Alfredo Gnecco Zuleta, congresista del Partido de la U, más cercano a Petro.
De hecho, dos meses antes del evento en el Cesar, Gnecco Zuleta figuró en el grupo de senadores del Partido de la U que está con Petro, y además, es uno de los que aceptó formar parte de la unión conocida como G-7, integrada por senadores de esa colectividad que desobedecieron las directrices políticas de la gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro y optaron por hablar sobre las reformas sociales directamente con Petro.
Cuentan que esa rebelión la originó el hecho de que los senadores no se sintieron representados por la entonces ministra de las TIC, Sandra Urrutia, cercana a Toro. El G7 lo integran los senadores Carlos Garcés, John Moises Basaile, José David Name, Julio Elías Chagüí, Berner Zambrano, José Alfredo Gnecco y Antonio Correa, quien se ha posicionado como puente entre el Partido de la Unidad Nacional y la Casa de Nariño. La U. es un partido que se ha declarado independiente. Otros tres senadores como Norma Hurtado, Alfredo Deluque y Juan Felipe Lemos hacen oposición al petrismo.
Cielo Gnecco fue investigada por concierto para delinquir, homicidio agravado por supuestamente haber participado en el secuestro y asesinato de dos contratistas que se habrían negado a pagarle una coima de 2.500 millones de pesos por un contrato de obra pública.
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