Así como el poder curativo de las plantas ha desempeñado un papel primordial en la salud a lo largo de la historia humanidad; existen también terapias complementarias y preventivas para recuperar y proteger nuestro cuerpo físico y conseguir armonía y bienestar.
Hoy dedicaré estas letras para sensibilizar a los lectores y para que se pregunten: ¿cómo se están sintiendo en estos momentos? Creo que nada bien. Lo veo en mis consultas. Todos llegan hablando como Susanita la de Mafalda, sin parar. Y es normal, es el único momento en que hago consiente cómo estoy.
Simplemente nos olvidamos de reír. Estamos demasiado ocupados, cansados, agotados y estresados. Saturados con el trabajo, la casa, las relaciones, la contaminación ambiental, la radiación, los malos hábitos alimenticios, el cigarrillo y el licor. Todo esto nos lleva a que no tengamos tiempo para pensar en nosotros. Entonces acumulamos y acumulamos toxinas y nos empezamos a sentir tan, pero tan mal, que nuestro cuerpo grita, literal. Inician dolencias en la espalda, la cabeza, gastritis, estreñimiento, insomnio… A nosotras las mujeres se nos empiezan a ver ojeras, bolsas en los ojos, la cadera más ancha y la lista no termina ahí…
Entonces surge la siguiente pregunta: ¿qué hay con todo esto? Sería bueno detenernos unos minutos al día y escucharnos, sentirnos, consentirnos y fluir en ese carruaje que nos acompaña día y noche, y que olvidamos frecuentemente. Entre las múltiples terapias con las que se cuenta en este momento para hacernos conscientes del cuerpo y conectarnos con él está la Ozonoterapia. Seguro que te suena la palabra ozono, sí esa capa que nos protege de las radiaciones ultravioleta del sol, actúa como un filtro, evitando nos llegue directamente la radiación.
¿Qué puede hacer el ozono por ti? El ozono medicinal son 3 átomos de oxígeno, vitales para que todas las células de nuestro cuerpo puedan vivir y ser saludables. Al entrar en contacto con tu cuerpo tiene efectos analgésicos, anti-inflamatorios, aumenta la circulación sanguínea, mejora la cicatrización de los tejidos, mata las bacterias, activa los sistemas naturales de defensa que tiene el cuerpo. Los tratamientos con ozono han sido investigados, probados y con resultados muy positivos para los pacientes. Cuba, Rusia, España, México y Alemania son los países que mas han desarrollado y difundido el uso del ozono como método terapéutico y novedoso para tratar problemas de salud que no han encontrado una adecuada respuesta a tratamientos convencionales.
Esta terapia es especialmente recomendada para personas que padezcan artrosis, artritis reumatoide, ulceras varicosas, pie diabético, psoriasis, gastritis, migraña, fibromialgia, vaginitis, celulitis. También, tiene una respuesta muy especial en la piel, le devuelve la belleza natural, la revitaliza. Mejora los problemas de acné, previene la caída del cabello. Para esta terapia no hay una única receta. La forma y dosis de aplicación depende de cada paciente y el objetivo terapéutico que se persigue. Se complementa con productos preparados a base de ozono como: aceites, cremas y jabones.
Sí podemos tener una mejor calidad de vida, sí podemos mejorar nuestra relación con el cuerpo. La perfección no existe, pero existe una mejor versión de cada uno de nosotros. La ozonoterapia mejorará nuestra salud.
