Los 44.643 votos que obtuvo el Sí, en el Putumayo, así lo están confirmando contra los 23.505 del No
Mocoa
La fuerza del amor y la esperanza de la vida en torno a la paz se mantiene latente en un departamento de 370 mil habitantes de los cuales cerca de la mitad, son víctimas directas del conflicto armado por parte de las Farc, AUC y del mismo Estado a través de la fuerza pública.
Víctor Álvarez, habitante del corredor Puerto Vega-Teteye, de la vereda La Carmelita jurisdicción del municipio de Puerto Asís, quien ha sentido el rigor de la violencia por culpa de las Farc, dice que en estos momentos su comunidad se sume en una incertidumbre porque no se sabe que va pasar si los acuerdos de paz no se cumplen por la perdida en el plebiscito. “No me quiero imaginar de nuevo los combates armados entre el ejército y los guerrilleros de las Farc, y los derrames de crudo contaminando los ríos, quebradas y humedales”, señalo el casmpesiono elcual perdió su pierna izquierda por culpa de una mina antipersona.
Oscar Cadena, otra de las víctimas de las Farc, en el municipio del Valle del Guamuéz, luego de conocer el resultado del plebiscito del pasado 2 de octubre se arrodillo ante la imagen de la virgen del Carmen, al tiempo que sus ojos se aguaron por las lágrimas que de dolor sintió al pensar que la guerra iba a volver la misma que en el 2005 le arrebato a su hijo mayor.
Carlina Esterilla, coordinadora de la mesa municipal de victimas del Valle del Guamuéz, manifestó que ahora ella vive en el limbo, como dice la a canción del cantante vallenato Kaleth Morales. “Desde el lunes 3 de octubre hasta hoy mi oficina es visitada por decenas de víctimas a preguntarme que va pasar, ¿que si es verdad que las Farc, va a volver? Y que ella en un tono sereno le manifiesta que hay que mantener la fe y la esperanza que la paz si se va a dar.
La diputada Yury Quintero y líder comunitaria del bajo Putumayo, no oculta su preocupación por los resultados del plebiscito y manifiesta que para ella en estos momentos la paz esta embolatada, pero lo que más le mortifica es que el cese biliteral al fuego se levante en forma definitiva después del 31 octubre como lo ha anunciado el presidente Juan Manuel Santos, con la consecuencia que de nuevo el sector rural del Putumayo, se convierta escenario de los combates armados y lo peor de los casos la detención arbitraria de varios líderes comunitarios los cuales el estado, los señala de guerrilleros como ha ocurrido en el pasado.
Pero el optimismo de la paz va más allá cuando la gobernadora Sorrel Aroca Rodríguez, le solicito al presidente Santos y a la comunidad internacional y a la misma ONU, que no deje desamparado al pueblo del Putumayo, por el temor que sienten la mayoría de sus habitantes en el sentido que la guerrilla va a retornar con más violencia a la región porque los acuerdos no fueron refrendados en el plebiscito por el pueblo colombiano.
“Le pedí al presidente Santos, que los recursos que pensaba invertir en el departamento dentro del tema del posconflicto no los invierta para la inversión social que tanta falta nos hace en el departamento”, señalo la mandataria.
En estos momentos 111 familias habitantes dentro de un perímetro de mil 400 metros de la vereda La Pradera, sitio transitorio de las Farc, jurisdicción del municipio de Puerto Asís, erradicaron en forma voluntaria 25 hectáreas sembradas con matas de coca, y este 13 de octubre recibirán de manos de Dirección de Gestión Territorial de la Prosperidad Social, la suma de $3.500.00.oo cada familia, pago que se efectuara en el banco Agrario de Puerto Asís, a partir de las 8 de la mañana, como lo señalo el asesor Hernán Enrique Vargas.
Pablo Londoño, beneficiario del programa de erradicación voluntaria señalo: “Nosotros aceptamos erradicar como una petición de protocolo para que los guerrilleros de las Farc, llegaran por seis meses a la vereda La Pradera, y cumplimos ahora esperamos que el Gobierno Nacional, nos cumpla, por lo menos ya nos entregaron un mercado por familia por un valor de 700 mil pesos, ahora esperamos la plata”, señalo el labriego, quien tiene confianza que los acuerdos de paz se matendran.
Varios sectores políticos y sociales que promovieron y votaron por el Si, llegan a la conclusión que el No, en el plebiscito tiene nombre propios Álvaro Uribe, quien quiere un protagonismo político para quedar en la historia que gracias a él y su Centro Democrático, se logró los acuerdos finales de paz con las Farc, al renegociar varios puntos.
Para la manifestación más sentida fue la de los niños y jóvenes que el miércoles 5 de octubre manifestaron en el marco de la plaza central de Mocoa, cuando encendieron velas en medio de la oscuridad de la fría noche para orar para que la paz, no se vaya para darle paso a la “señora” guerra, como lo manifestó Samuel Arenas Ordoñez, un joven de diez años quien argumento que los niños y los jóvenes del Putumayo, tienen derecho en vivir en paz.
Hay que recordar que los atentados de las Farc, a la infraestructura petrolera, eléctrica y vial del Putumayo, más los ataques a las estaciones de policía, y bases militares, las extorsiones, secuestros, desplazamientos, reclutamiento forzado y desapariciones han cobrado 152.442, según la Unidad de Victimas Putumayo.-