Con qué lo curaremos… Con cáscaras de huevo...
Cerca de 30 personas cayeron desde de uno de los puentes artesanales de casi 60 metros de altura, sobre arroyos de piedras gigantes que construyeron las familias moradoras del predio La Esmeralda, ubicado en la reserva natural Buena Vista, de la vereda El Carmen, en Villavicencio.
El resultado: 11 muertos que pudieron ser 25 con los 14 heridos.
Esos puentes de tablones amarrados con sogas, han existido hace algún tiempo en la región, pero su función es soportar con dificultad el ir y venir de los pocos habitantes de la zona que lo cruzan como parte de sus necesidades básicas de comercio, educación y salud.
Es decir; son puentes diseñados y construidos para resistir poco peso.
Pero a pesar de que ayer fin de vacaciones, cientos de personas decidieron cruzarle para ver el paisaje en medio de la aventura. Querían cruzar el puente el último día del puente festivo.
Pero primero; tenían que pagar dos mil pesos de peaje. no para arreglos…si no para el bolsillo de los vivos que viven de los bobos.
Y segundo a “un grupo de inteligentes” que cruzaban el puente atestado de gente, se les ocurrió que sería muy chévere asustar a los demás, meciendo la vetusta estructura del puente en medio de alaridos histéricos tan propios de la juventud de estos días.
A pesar de que muchas personas, les pidieron, rogaron, y ordenaron que dejaran la bromita, pues presentían lo que iba a suceder, al “el grupo de inteligentes” les importó un carajo, y siguieron con más vehemencia y con más fuerza aferrados a las sogas halando para allá y para acá, hasta convertir el puente colmado de gente en un columpio mortal.
El puente se quebró, por la demencia y el sobrepeso y casi treinta personas cayeron al vació quebrándose la vida contra las rocas del arroyo.
Es un caso para la Fiscalía, donde alguien debe pagar por homicidio culposo.
Hoy “el grupo de los inteligentes”, hace fila en sus respectivas camillas metálicas para su autopsia.