Después de que el excandidato al Senado de la República por la lista alternativa de Fuerza Ciudadana, Gilberto Tobón, decantará su aspiración a la Alcaldía de Medellín se ha esforzado vehemente por copiar el estilo político de Rodolfo Hernández, mostrándose como un candidato independiente que va a unir a la ciudad en una puja insistente por separase del Petrismo, luego de quedarse sin Ministerio, y hacerle guiños al uribismo.
El profesor Tobón al mejor estilo de Rodolfo Hernández en las elecciones presidenciales, está inmerso en profundas contradicciones, como diría el mismo Rodolfo: “en política recibimos a la Virgen Santísima y todas las putas que vivan en el mismo barrio con ella”. Su apuesta, al parecer, se trata de llegar a un cargo público a como dé lugar y con quien sea.
Al candidato que en otrora se hizo popular por sus posiciones claras y por una postura política definida, le quedará un poco difícil mantenerse en esa posición de independiente, basta con ver la familia que lo financia y que lo ha llevado donde está; se trata de la familia Obando, dueña de la transportadora Coordinadora, el Centro Comercial Mayorca y del canal Cosmovisión que ha sido piedra angular para su reconocimiento en medios.
Pero aún más increíble ver cómo pasó de ser contratista de la Alcaldía de Medellín donde se desempeñó como asesor de la secretaría de educación a un opositor sin contrato y con aspiración de ser el próximo alcalde, lo que le ha dado no solo para cambiar de criterio sino también para atacar a incluso sus votantes.
Al mejor estilo de Rodolfo Hernández ahora el profesor Tobón Sanín se cree por encima de todos los demás, con una especie de superioridad ética y moral para ser independiente, pero cuyo pasado y patrocinadores no se lo permiten, la contienda por la administración de la segunda ciudad más importante de Medellín apenas comienza y las contradicciones del profesor serán cada vez mayores.