Después de haber sido concejal de Barranquilla, donde vivió con su familia después de sobrevir a un atentado que lo postró en una silla de ruedas, el guajiro Miller Soto se prepara a competir por la gobernación del departamento, cargo al que aspira también el excomandante de las Farc Joaquin Gómez.
Hijo del entonces alcalde de Barrancas, José Soto Berardinelli, tenía 15 años cuando fue sacado a la fuerza por un grupo armado, delante de sus compañeros del colegio Cristo Rey en Fonseca, ante la mirada de horror de otros jóvenes. Iba secuestrado camino de la serranía del Perijá, cuando a sus captores se les pinchó una llanta del carro en el que lo trasladaban vestido con una camisa de camuflado, que se convirtió en un blanco. Los alcanzaron unos agentes del ya cuestionado DAS que les disparó, hiriendo a Miller con bala que penetro su columna vertebral. Desde entonces, hace 28 años, quedó reducido a una silla de ruedas.
Después de terminar estudios de postgrado en la Universidad de Verona regresó a La Guajira y ahora quiere jugársela por su tierra y muy probablemente obtendrá el aval del Centro Democrático. Está listo para enfrentar a Gómez y desde ya cuenta con el apoyo entusiasta del popular Silvestre Dangond quien en febrero pasado puso un trino y el 27 de diciembre lo hizo público en el concierto que ofreció en su natal Urumita. El próximo 2 de febrero se sabrá, como es tradicional en Riohacha, en la celebración de la Virgen de los Remedios, cómo quedará el ajedrez político.