El registrador especial de Pereira, Raúl Armando Rico, quien llevaba 18 años en la entidad, fue uno de los funcionarios de carrera destituidos por el registrador Alexander Vega, para ser reemplazado como todos los otros por cuotas políticas departamentales. Rico Galeano, como los declarados insubsistentes con base a una leguleyada de Vega, interpuso un recurso para defender su puesto y poder retomar las funciones.
El pasado 10 de febrero, mediante resolución 038, dos delegados departamentales del Estado Civil en Risaralda procedieron a reintegrar el despedido registrador. Casos como este, acompañados de las debidas indemnizaciones, muy seguramente se empezaran a repetir en las distintas registradurías regionales.
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