En los centros hospitalarios siempre acuden personas que presentan problemas de salud, como el caso de la vida real de un personaje al que llamaremos Gregorio, con el fin de omitir su nombre a petición de este.
Gregorio es un hombre de aproximadamente 20 años residente en el Barrio Nueva Floresta en Santiago de Cali, estudiante del programa de Ingeniería Industrial en la Universidad del Valle Campus Meléndez.
Es muy talentoso en su formación académica con un alto promedio académico y comprometido con sus estudios.
Sin embargo, en la vida siempre hay situaciones que hacen que la felicidad no sea total. Para el caso de Gregorio, la causa de su falencia en su estado emocional es su enfermedad de cáncer de pulmón a causa que es un fumador. Así pues, a diario consume cinco cajetillas de cigarrillos y es una adicción que no puede dejar.
Tras esto, desde que le diagnosticaron la enfermedad sigue su consumo habitual hasta el día que sucedió algo inexplicable en su vida.
Entre tanto, el 8 de diciembre cuando por complicaciones en su estado de salud se recluye en un centro hospitalario y se acerca a media noche una mujer de contextura delgada vestida de enfermera muy enojada a expresarle a Gregorio que debe dejar de fumar, porque esto está acabando con su vida.
El paciente no responde nada, pero grita cuando observa que la enfermera se convierte en un esqueleto. Ante su llamado, llegan otras enfermeras y le dan a conocer que en ese hospital siempre aquel espanto se presenta a pacientes que están en estado de salud grave, y es una compañera de ellas que se suicidó lanzándose del último piso de aquel lugar al vacío porque tenía una enfermedad terminal.
Tras esto, Gregorio se calma y les interroga sobre la presencia extraña que se le presentó y estas le dan a entender que es porque quizás si sigue su vicio de su cigarrillo muy pronto va a ser su deceso.
Por otro lado, pasan los días y a Gregorio le dan salida. Así pues, este decide dejar definitivamente su consumo porque de una forma u otra sabe que las consecuencias de sus actos no son buenos.
Finalmente, Gregorio sigue con sus estudios y reconoce que la presencia de seres del más allá ocurre con el fin de transmitir un mensaje positivo a personas que lo necesitan para reformar su vida como en su caso.