El inaplazable reencuentro de los presidentes de Cuba y Estados Unidos tras el deshielo de sus relaciones en diciembre pasado empujó al presidente de Venezuela Nicolás Maduro a bajar el tonó contra EE. UU. Maduro llegó a Panamá dispuesto a ‘’asumir una nueva era de relaciones’’ luego de una reunión de distensión que sostuvo el pasado miércoles con el enviado de Obama a Caracas, el consejero del Departamento de Estado Thomas Shannon.
Una de las noticias que puede producir el histórico encuentro entre los presidentes Obama y Castro -como indican las señales diplomáticas- es la posible decisión de Obama de sacar a Cuba de la lista de países que apoyan el terrorismo. El previo apretón de manos entre el canciller Cubano Bruno Rodríguez y el Secretario de Estado de Estados Unidos John Kerri ya es el encuentro de más alto nivel entre ambos países desde 1958, cuando el entonces primer ministro Fidel Castro se reunió en Washington con el vicepresidente estadounidense del momento, Richard Nixon. El presidente Santos fue clave para que Cuba fuera invitada por primera vez a la cumbre que se realiza desde 1994 ya que en la pasada reunión en Cartagena advirtió que no sería posible otro encuentro sin la participación de Cuba.