Se encuentra en etapa precontractual un proyecto de generación de energía que se desarrollaría en predios de EMCALI. El llamado “Proyecto Mulaló” consiste en la construcción y puesta en marcha de dos plantas de energía fotovoltaica de 69.9 MWp.
La convocatoria establece que EMCALI será dueña del 40 % del proyecto mientras que el privado tendrá el 60 % del mismo. Hay que recalcar no se han presentado los estudios que justifiquen la viabilidad financiera, jurídica y/ o administrativa de una alianza público-privada, donde será el particular quien obtendrá el mayor usufructo de la operación comercial y donde EMCALI no tendrá capacidad de decisión sobre su desarrollo.
Tampoco se justifica la duración del contrato (24 años) que cuenta con una serie de vacíos que no permiten determinar con precisión el monto de los aportes del aliado estratégico o la forma de vinculación laboral del personal del proyecto.
La inversión de EMCALI prevista para el proyecto es de $90.548.000.000, monto que amerita todo el escrutinio y análisis dada la magnitud de la misma, así como también los antecedentes de la participación de las Empresas Municipales en este tipo de negocios, específicamente en TERMOEMCALI, donde EMCALI fue un socio minoritario y terminó perdiendo alrededor de $1.6 billones de pesos, afectación que aún tiene repercusiones en el presente y futuro de la empresa.
Tal como en el negocio de TERMOEMCALI, EMCALI deberá comprar la energía comprometida en el contrato sin que haya claridad de que dicha compra garantizará precios favorables a nuestra empresa.
Es preciso señalar que además de los hechos mencionados, también genera alerta que el proceso contractual ha sido por decir lo menos, atropellado, tanto así que fueron modificados los términos contractuales y se ha pospuesto la recepción de propuestas en por lo menos, léase bien, 9 ocasiones. En ese sentido, el senador Alexander López elevó recientemente una consulta y advertencia frente al proceso contractual, dado que existen indicios de un posible favorecimiento a una de las empresas interesadas.
El gerente general Juan Diego Flórez ripostó a la opinión pública que antes de criticar, debemos agradecer que el proceso contractual no se hizo a dedo, como en pasadas ocasiones.
El gerente debe recordar que su deber es velar por la protección de los recursos públicos, labor en la que los yerros brillan más que los aciertos pues sobran escándalos por contrataciones fraudulentas en las Empresas Municipales de Cali que con rigor ha denunciado y seguirá denunciado SINTRAEMCALI.
Lastimosamente los responsables de los desfalcos y malversaciones siguen intocables paseando por los pasillos de la empresa.
La ciudad no puede permitir otro mal negocio que le cueste a EMCALI su patrimonio y su carácter de empresa industrial y comercial del Estado, y los trabajadores seremos garantes de ello.
