El placer de escuchar discos en acetato cada vez se hace más lejano incluso hoy casi nadie compra cd's. La música se almacenan en pequeñas memorias que hacen más fácil su transporte. Ya nadie tiene que cargar cajas de cartón llenas de casetes o un aparatoso walkman que casi no cabe en la mano. Todo esto solo queda en los recuerdos, sin embargo la manera de grabar música sigue siendo mejor a la antigua. Hoy en día las nuevas tecnologías han facilitado las labores cotidianas pero han acabado con las tradiciones. La manera antigua de grabar canciones era en cinta, la de hoy es por medio de programas electrónicos que permiten editar las canciones las veces que se consideren necesarias.
¿Cuál es la diferencia?
Cuando se graba en cinta no hay forma de deshacer el proceso, lo que se va grabando es lo que va quedando y eso genera una mayor responsabilidad y sentido de pertenencia.
Es un proceso que restringe la posibilidad de manipular lo que se graba y requiere de mucho oído ya que no existe la posibilidad de ver en una pantalla lo que se está grabando.
El sonido que da la cinta es totalmente diferente al sonido que se logra capturar de una forma digital. Hay una relación más cercana con el medio donde se graba por el simple hecho de que se corta y se pega físicamente al igual que se hacen las marcas escritas a mano.
En la actualidad hay pocos estudios que usen este formato, uno de ellos es la disquera Daptone Records en Nueva York. Todos los proyectos de Daptone son grabados de forma análoga.
Gabriel Roth, fundador de Daptone, ha sido uno de los precursores de implementar estas técnicas análogas de grabación en el nuevo milenio. Entre los artistas que han trabajado con él están la fallecida Amy Winehouse, la cantante de soul Sharon Jones y el canadiense Michael Bublé.
https://www.youtube.com/watch?v=8AsFMctavnk
En Colombia los estudios de grabación en cinta los han convertido en estudios que solo graban de manera digital porque se tiene la creencia de que las técnicas análogas son arcaicas. Hace falta explorar esta forma de producir, grabar y mezclar música de una forma análoga. Tal vez por falta de conocimiento de la nueva generación de músicos y productores que ahora solo quieren usar programas digitales como Protools o LogicPro.
El uso de estos programas tiene como consecuencia la pérdida de la personalidad que cada intérprete le da a la canción, ya que con los programas digitales se puede sobre manipular lo que se graba. Valdría la pena tener en cuenta esta forma de grabación en Colombia para que la interpretación no se refunda en lo digital y el valor de la música cobre el valor que merece.
