Las historias de violencia pululan en Cali. La inseguridad en la capital del Valle viene en incremento desde la pandemia y las autoridades no han podido detener lo que para muchos se puede interpretar como una ola de violencia que ha arrasado con muchas vidas y familias caleñas.
Ejemplo de lo anteriormente afirmado, está la historia de Hernando, un caleño a quien un sicario le pegó 3 balazos el pasado 6 de mayo del 2020 por haber sido testigo del asesinato de su vecino. Las balas no solo lo destruyeron el hígado, el pulmón derecho, el riñón derecho, sino que lo dejaron postrado en silla de ruedas, usando pañales, sin trabajo y con temor porque su victimario sigue en las calles, libre y haciendo de las suyas.
Esta es su historia: