En pleno siglo XXI, una de las adicciones más perceptible es la dependencia a la cocaína, precisamente esta, es considerada una de las drogas o también llamada veneno, a la que se le debe dar solución con mayor primacía, pero ¿Cómo se está resolviendo?
Muy claro, quemando todas las zonas habitadas por la planta o encarcelando al agricultor, quien está trabajando tan bien, que la planta de la coca está en crecimiento continuo.
Vamos a empezar por partes, ¿Es verdaderamente la planta una adicción? Con solo mencionarlo suena ilógico, pues la planta lo único que hace es existir, no es un ser pensante que elige ir detrás de una persona para que la ingiera, es más, es el remedio casero que durante muchos años se ha utilizado.
Entonces ¿Por qué matar algo que solo existe? Es tan injusto como la caza de los animales.
Es necesario hacer saber, que con la quema de la coca no solo está se acaba, sino que se acaban con muchísimas especies que habitan estos lugares, se incrementa la contaminación atmosférica en un nivel altísimo, en otras palabras, día a día adelantamos el momento de la extinción humana.
Estamos aumentando nuestra guerra con el planeta, él nos da y nosotros lo dañamos, no damos nada y le quitamos todo, ¿Qué estamos pensando?, ¿Por qué parecemos seres sin pensamiento lógico? ¿Por qué los animales se han convertido en mejores seres que la especie humana?
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Realmente todo se reduce a la necesidad de ser feliz que posee el ser humano, estamos tan vacíos como especie racional, que buscamos una emoción por parte de elementos externos, nos encontramos tan insatisfechos, que buscamos medios que logren llenar las partes que están en blanco y es así, como acudimos a la cocaína y nos convertimos en seres dependientes a una planta inofensiva.
El problema es la soledad tan grande que el ser humano ha venido acogiendo, con el paso del tiempo, las personas, los sentimientos, la belleza y el amor se ha convertido en algo superficial.
Vivimos en una sociedad de apariencia, en la cual, lo único importante es caerle bien a todos, es aparentar una vida feliz, aunque no la tengas.
Es tan normal llegar después de toda una jornada fuera de casa con un agotamiento mental increíble, sintiendo nuestra energía en un 10%, ¿Te has preguntado a que se debe esto?
Claro, al cansancio que produce fingir que estas bien, al cansancio de aparentar una felicidad que no sientes, al cansancio de intentar caerle bien a la sociedad, al cansancio de pretender no equivocarnos.
Entonces, llegamos a casa y sentimos que nadie nos quiere, que estamos solos en un mundo tan inmenso, que no somos suficientes para nadie, que realmente no somos felices, pero claro, ¿Cuál es el camino que muchos eligen como una solución?
Ingerir drogas, cada vez que te sientes así lo haces y te hace llegar a un lugar en el que no tienes que pensar, solo disfrutar y como regalo adicional, te vuelves dependiente.
Algo que constantemente me cuestiono, es ¿desde cuándo el ser humano se siente solo? Y ¿Por qué?, es bastante paradójico que un ser pensante, que está rodeado de tantos iguales se sienta solo, básicamente lo tenemos todo para ser felices, pues tenemos la capacidad de pensar, que ahí se resume todo, pero ¿Por qué entre más sabes, más mal te sientes? ¿Es la ignorancia la felicidad?
En conclusión, el ser humano es el problema, no tiene justificación que estemos acabando con el planeta.
La solución más lógica es trabajar en la mente del ser humano, estudiar cómo se puede lograr la superación a la soledad y a los problemas personales sin acudir a plantas como la coca, pues en un final, solo nos lleva a sentirnos más mal y a despachar los sueños o metas que se planeaban.
