Es realmente loable que la W Radio, en cabeza de su director Julio Sánchez Cristo, haya recogido $6.000 millones para ayudar a los jóvenes del Pacífico que queremos estudiar en una Universidad importante del país. Con lo que no estoy de acuerdo es con que nos imponga a Los Andes. Basta pasear un poco por internet y googlear para darse cuenta del matoneo que han sufrido por parte de los estudiantes uniandinos los que han ingresado allí cobijado por el programa Ser Pilo Paga. Incluso los estudiantes que no son muy ricos o los becados de cualquier índole van constantemente al sicólogo por las agresiones y algunos hasta se han suicidado.
Se que la idea viene en conjunto con la propia universidad que acaso querrá lavar sus culpas con esta inicitativa, ¿pero por qué ponernos en esas? ¿cómo no reparar la incomodidad que podríamos sentir al rozarnos con la élite de un país racista, católico, un país que nunca nos ha aceptado como parte de ellos mismos? Me parece una falta de sentido práctico, de no ver el paisaje en su totalidad. Yo no tengo ni abrigos, ni ropa de invierno para irme a vivir a Bogotá, una ciudad que se parece todavía a la descripción que hizo de ella García Márquez, el joven costeño, que vio una ciudad lluviosa llena de gente vestida de luto y sin mujeres en la calle. ¿Por qué imponernos Bogotá si tenemos más cerca a Medellin y a Cali?
No quiero sonar a malagradecido pero yo me sentiría como mosco en leche en Los Andes. Me daría mucho miedo fracasar en una ciudad tan grande, tan ajena, tan lejana, tan elitista y racista como Bogotá. No quiero el frío a cambio de eso además, ¿quien me garantiza que nos irá bien? Si me llegara a ganar una beca que sea en Medellín o en Cali. A mí no me impongan capitales ni universidades de gomelo.