Mucho se habla de la sorpresa republicana de la Florida en estas elecciones, también sobre por qué Trump ganó en este estado latino luego de expresar posturas racistas y xenófobas, y de que la crisis del coronavirus pésimamente manejada por él se haya ensañado especialmente con los latinos y afros.
Hay un artículo de Christian Paz, editor del Atlantic (1), que me parece muy interesante y responde a esta pregunta. El texto presagió el triunfo de Trump en Florida cinco días antes de las elecciones, cuando las encuestas decían lo contrario. Luego de leerlo hoy de nuevo un par de veces, les comparto mis reflexiones:
Primero, no todos los latinos votaron por Trump, de modo que no se debe generalizar. Recordemos que Trump ganó en Florida con 5.6 millones de votos y Biden obtuvo 5,2 millones.
Segundo, no hay un solo tipo de latino, hay muchos: desde los cubanos que llevan varias generaciones en la Florida, los puertorriqueños, los haitianos, los hondureños, hasta los mexicanos, los colombianos, los peruanos, los recién llegados venezolanos, etcétera.
De modo que me referiré a los "latinos pro-Trump" para no generalizar. Ahora, no sobra decir ni hacer la salvedad de que este es un intento demográfico y sociológico de acercarme al tema, pero que seguro está sesgado por mis propios prejuicios. Así que léanlo con precaución y envíenme sus críticas que serán recibidas de buen agrado.
- El latino pro-Trump, a diferencia de sus primos progresistas pro-Biden, no necesariamente sienten solidaridad con los latinos en general; es más, muchos de ellos se identifican primero como estadounidenses que como latinos.
- Creen que la migración no regulada también los afecta a ellos y a sus trabajos, así se trate de otros latinos. Al fin y al cabo, ellos ya son estadounidenses. Hay latinos que incluso reniegan de su origen (que los expulsó por razones de pobreza, violencia o política) y no les gusta ser llamados "latinos”.
- El latino pro-Trump cree más en el esfuerzo individual, ya que se ha forjado solo y entiende al Estado como el que le ayuda a salir adelante, por ello les hace eco frases de Trump como “primero la economía” o “hay que abrir la economía”.
- Los latinos pro-Trump no tienen “conciencia de clase trabajadora” o “conciencia de comunidad latina”, más allá de reconocerse entre sí. Ellos no creen que sus problemas personales tengan que ver con los problemas sociales (a excepción clara de la economía). Se ven a sí mismos como personas que tienen que salir adelante solas y que se han forjado solas, y por ello admiran el estereotipo de Trump del “empresario exitoso hecho a pulso”
- Podríamos decir que si al latino pro-Trump le va bien en su trabajo y crece económicamente, esas son razones suficientes para elegir un candidato, para ellos las causas sociales son secundariedades.
- En este sentido, se explica por qué a latinos pro-Trump les llega el mensaje sobre el "socialismo”, “comunismo”, “castrochavismo" y cosas así, ya que los ven como enemigos de su propio progreso económico.
- Al latino pro-Trump temas como el racismo sistémico no les preocupan demasiado porque piensan que las personas deberían poder levantarse por sí mismas y asumir la responsabilidad personal de sus circunstancias, incluso piensan que Trump no es racista o no les importa si lo es.
- Ahora, los cubanoamericanos y venezolanos en la Florida sí tienen un sesgo político claro y hasta cierto punto justificado, han salido de sus países por oponerse a un sistema, y a uno puede o no gustarle su postura claramente de derecha, pero se debe respetar.
- Los latinos que votan por el republicano creen que Trump no habla correctamente de su comunidad (al referirse a los mexicanos como atracadores y narcos que llegan a delinquir a EE. UU.), pero entienden por qué lo dice, piensan que su país se está descomponiendo, de algún modo lo justifican.
- Si les dice que el COVID-19 afectó más a los latinos lo ven como un problema de los latinos indisciplinados, no de las políticas públicas.
- Buena parte de los latinos pro-Trump no ven el cambio climático como un problema inmediato, otros lo cuestionan y algunos que sí creen en ello lo ven demasiado lejano como para preocuparse, primero está su trabajo. Lo paradójico es que, si no se hace nada, sus nietos y bisnietos seguramente tendrán que migrar a estados del norte hacia el 2090 (cuando buena parte de las costas de la Florida como las conocemos hoy desaparecerán debido a la subida del nivel del mar).
- Finalmente, una buena parte de los latinos que votan por Trump, especialmente de países de Centroamérica y Suramérica, no tuvieron la oportunidad de tener formación académica, muchos de ellos, no todos, son personas que la pobreza expulsó de sus países de origen y que luego de mucho esfuerzo, pero mucho esfuerzo, se hicieron una vida en Estados Unidos.
Para ellos tener un buen trabajo es todo. No tuvieron oportunidad de ir a una universidad, pasar cinco años estudiando, compartir espacios de reflexión, ser expuestos a puntos de vista críticos, ni interactuar con personas que no piensan como ellos. Su existencia pasó de una vida de necesidades y frustraciones en su país de origen a una vida de trabajo y esfuerzos para hacerse un lugar en un país donde los estratos bajos trabajan 16 horas de domingo a domingo. Esto explica que para ellos tener un buen trabajo sea todo y que un tema como los derechos sociales signifique poco, ya que ni siquiera los entienden porque nunca tuvieron el tiempo suficiente para pensar en ello.
(1) What Liberals Don’t Understand About Pro-Trump Latinos