Reconozco que hace algún tiempo sostuve admiración por el exdecano de la Facultad de Sociología, Fabián Sanabria. Existió una época donde era consultado por todos los medios cuando algún tema coyuntural surgía y él respondía con una meridiana claridad y brillantez. Cuando se postuló para rector de la Nacional lo apoyé. De ese respeto intelectual, no queda nada; porque Fabián no es lo que solía ser.
Fabián Sanabria ha pasado de ser un académico reconocido a un propagandista reconocido. Sus temas ya no pasan por teorizaciones o refutaciones, sino por única y exclusivamente una suerte de activismo político permeado de ironía y de una lamentable estela de mentiras e hiperbolizaciones innecesarias, especialmente respecto a Claudia López, su nueva obsesión. Cada vez que Claudia da un paso, Fabián aprovecha para armar un escándalo y llevar al absurdo situaciones banales o que no deberían revestir mayor importancia en un país históricamente gobernado por corruptos y gente poco preparada para gobernar.
Nadie dice que Claudia López sea un elemento libre de críticas, nada más alejado de la realidad. Pero Fabián utiliza elementos de su vida privada como móviles para sus críticas, haciendo escándalos vergonzosos en un país donde se caen los puentes o donde los fiscales anticorrupción son corruptos. Lo último y más lamentable: utilizar el segundo nombre de Claudia como peyorativo.
¿Por qué "Nayibe", un nombre popular y de clase baja, es utilizado como forma burlesca o peyorativa para referirse a la alcaldesa de Bogotá y a una de las 100 mujeres más influyentes del mundo según BBC? No me venga a decir ahora que es por cariño, Fabián.
Esta pregunta se la hice a Fabián Sanabria en diversos posts propagandísticos de esos que hace; nunca obtuve respuesta. Por el contrario, siempre me censuró y borró la pregunta. Por eso, busco alguna manera de enriquecer este debate parlanchino y cantinflesco que es el debate político colombiano. Tal vez con este artículo, el famoso crítico (o criticón) de Fabián deje de eludir las críticas y responda:
¿Por qué utiliza el segundo nombre de Claudia como burla? ¿Acaso le causa gracia que una persona de nombre Nayibe sea alcaldesa? ¿No es descalificada per se una crítica que arranca con una falta de respeto? ¿Por qué su obsesión con Claudia López? ¿Por qué su decadencia estrambótica y por qué se ha convertido en un propagandista político?
Llamar "Nayibe" o incluso "La Nayibe" a Claudia López no es más que un arribismo disfrazado de crítica. Y así seguirá siendo, hasta que por lo menos el nuevo activista político e influencer, Fabián Sanabria, deje de censurar la pregunta y se digne a responder. Estaré (y estoy seguro de que muchos más) esperando.