No había que ser experto para predecir que este año ganábamos Miss Universo. Paulina Vega Dieppa después de haber entregado la corona de Miss Colombia a Ariadna Gutiérrez, partió rumbo a Miami para participar en Miss Universo a principios de enero y desde entonces sus fotos produjeron un éxtasis colectivo entre los reinólogos, esos especímenes en vía de extinción que año tras año siguen Miss Colombia y Miss Universo sin importar que el tema que les congrega cada vez pierda más importancia ante la sociedad. Por esa misma razón ellos tienen más autoridad que cualquier otro periodista para hablar del tema y a decir verdad, desde Taliana Vargas no se emocionaban tanto con una colombiana en el magno evento de la belleza.
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A la hora de hacer el ejercicio de detallar todo el grupo, era quizá la primera vez que la candidata de Colombia era la más convincente, pues aparte de España –con tatuaje en la entrepierna incluido-, entre las demás no se divisaba otra que tuviera el “paquete completo” para coronar, pues la que tenía belleza carecía de actitud, preparación o iba muy mal vestida/arreglada lo cual suele pasar con la mayoría de europeas (Francia, Serbia, Austria y Ucrania lo demostraron este año). Venezuela tenía belleza y carisma pero según se comentó, lucio un poco pasada de peso; Filipinas y Brasil este año no mandaron las mejores candidatas y Estados Unidos ocupó un lugar entre las finalistas solamente por ser Estados Unidos. Costa Rica, Argentina, República Dominicana, Australia y Puerto Rico fueron otras de las candidatas a las que también se tuvo en la mira pero sus atributos tampoco parecen ser superiores a los de la colombiana.
España, Venezuela, Australia y Costa Rica son otras candidatas que según los seguidores del certamen y páginas especializadas, dieron la pelea
Claro está que de las 88 candidatas, apenas 16 compitieron durante la noche final transmitida el domingo 25 de enero. De esas 16, 10 fueron escogidas por un jurado especial durante un evento preliminar donde desfilan en traje de gala y de baño, 5 por Donald Trump y su equipo de Miss Universo, y una por votación web en la que cualquier cibernauta podía participar.
Por ahora, y después de haber ganado el título universal de la belleza, es muy poco probable que la veamos volver a la Universidad Javeriana retomando la carrera de Administración de Empresas que estudiaba antes del reinado pese a que manifiesta intenciones de hacerlo. Ahora su agenda estará cargada de eventos y responsabilidades propias de una reina internacional de la belleza.
Ariadna Gutiérrez, quien tiene experiencia como una de las modelos más destacadas del país, será la encargada de representar a Colombia en la próxima edición de Miss Universo.
El concurso se encuentra en el punto más crítico de toda su historia, siendo 2014 el primer año en que no se celebra desde su primera edición en 1952 porque ningún país hoy día está dispuesto a pagar la millonaria cifra que exige Donald Trump a cambio de acoger el certamen y eso mismo obligó al magnate a improvisarlo en uno de sus hoteles en Miami, como sucedió con la presente edición.
Lo cierto es que una corona para un país que desde hace más de medio siglo la anhelaba sería una magnífica estrategia para revivir el interés, al menos de Colombia, hacia el tema de Miss Universo y tanto Paulina Vega como Ariadna Gutiérrez reúnen los atributos suficientes para cargar tal corona, porque de las 62 ganadoras que ha tenido este concurso por mucho unas 15 han tenido un atractivo físico verdaderamente extraordinario, el resto han sido mujeres agraciadas sin mayor belleza tal como para decir que se trate de la más hermosa del universo.
57 años después de que Luz Marina Zuluaga consiguiera la única corona hasta ahora para Colombia, Paulina Vega es coronada Miss Universo.
Aunque hay rumores de que posiblemente a finales de este año se adelante otra edición de Miss Universo, esto no es más que un chisme de pasillo pues ni los mismos organizadores del certamen tienen idea ni cuando ni dónde se celebrará el concurso la próxima vez. Tampoco está claro aún si esta edición corresponde a 2014 o 2015, pues aunque los organizadores aseguraron que el evento que actualmente se celebra en Doral (Miami) se llama “Miss Universo 2014” de no realizarse otra vez este año, sería algo confuso realizar cada año un evento que corresponde al anterior.
https://www.youtube.com/watch?v=ZPG_rNMRrD0
De las razones por las cuales Miss Universo ha sido relegado a ser simplemente una mala réplica de lo que era en sus épocas pasadas, aparte del creciente desinterés del público, destacan sus problemas de management a nivel organizacional como empresa, más que del certamen anual. Es decir, la reina elegida durante el año que carga el título debería hacer presencia en los puntos (campañas publicitarias, revistas, alfombras rojas, etc) que mayor atención del público recibieran, por ejemplo la entrega de los Óscar, una portada en Vogue o una campaña con Victoria´s Secret, no solo en Estados Unidos sino en el mundo entero. Aunque en efecto hay todo un equipo que se encarga de manejar la presencia mediática de la reina en medios, éste ha sido insuficiente porque a Miss Universo en Estados Unidos no la conoce nadie.
Otro factor que no solo es causa sino prueba de la crisis del certamen, es Miss Mundo concurso que por excelencia ha sido su competencia desde 1951. Mandar una candidata al reinado de origen británico es más barato que hacerlo al estadounidense y así lo corroboran las casi 120 mujeres que participan allí, frente a las 80 que en promedio asisten al concurso de Trump, siendo esta una razón para que cada vez más países se interesen por Miss Mundo en lugar de Miss Universo. Solo basta observar la producción, la escenografía, el espectáculo de la velada de coronación de Miss Mundo y compararlo con lo que ha hecho Trump en la última década para darse cuenta de que hay una diferencia notable.
En todo caso nuestros reinólogos tienen claro que deben gozarse este Miss Universo como si fuera el último, pues al paso que vamos pensar que así podría ser no es una idea del todo desacertada. Tanto Paulina Vega como Ariadna Gutiérrez son para ellos ese premio que luego de tanto persistir llega, tarde y casi al final pero llega, y el que a Colombia le haya llegado esa corona, que duró más de medio siglo anhelando en un momento cuando parece haber perdido el interés, no tuvo nada de raro pues todo estuvo dado para que así fuera. No en vano pasa que cuando se deja de buscar algo, se encuentra.
Por @enriquecart
