No sé para qué soy leal a ustedes, si cada experiencia que tengo con el banco es peor. ¿De qué me sirve tener tarjetas preferenciales con ustedes si en servicio al cliente me tratan como a un enemigo?
Cometí el error de aceptar una de sus tarjetas de crédito y ha sido la peor experiencia que he tenido con el sector financiero. Además, después de unos meses de utilizar el producto decidí indagar sobre la nueva política de redención de puntos llamada "Puntos Colombia" y me llevé tremenda decepción. A partir de agosto los puntos de las tarjetas de crédito solo se pueden redimir en boletos de cine, comida rápida y existe una opción para viajes que es casi imposible de adquirir por la cantidad de puntos que exigen.
Es el colmo que un consumidor gaste 4000 dólares en un mes pagando una tasa de casi el 30% (efectiva anual) y sus puntos solo le sirvan para ir a cine, comprar ciertos artículos en el supermercado y redimirlos en comida rápida. Es absurdo que aunque se gaste estos 4000 dólares le toque encimar alrededor del 80% del valor del tiquete en pesos para redimir un boleto aéreo nacional. De verdad, es verdaderamente horrible que no tengan un catálogo decente con artículos que los clientes quieran redimir.
Con eso en mente, después de analizar la nueva modalidad de redención de puntos decidí solicitar una tarjeta que tenía convenio directo con la aerolínea y por esta razón los puntos pasarían directamente a mi cuenta de viajero frecuente y no a este programa de redención que deja mucho desear. Sin embargo, cuando la tarjeta llegó, después de haber dado todos los documentos requeridos, llamé para activarla y por un error interno no pude. Me comuniqué con servicio al cliente y me dijeron que la tarjeta estaba bloqueada y que no era posible activarla porque el área encargada no laboraba días festivos.
Al otro día me comuniqué y después de una larga espera me dijeron que debido a que las políticas cambiaron no me la podían activar, que debía ir a una sucursal, tomar un turno y perder más tiempo esperando a que un asesor me resolviera el error que fue causado por la misma incompetencia del banco.
Finalmente, debido la falta de profesionalismo del banco, este me hizo otra tarjeta y además me puso a esperar 8 días más, teniendo que hacer pagos. ¿Dónde quedaron los derechos del consumidor? ¿Por qué los ciudadanos pagamos tasas de casi el 30% (efectiva anual) y dejamos nuestro dinero en unas cuentas de ahorro, que más bien parecen de desahorro por las cuotas de que cobran, y estas entidades nos prestan un servicio tan deplorable?