Desde hace un tiempo viene sonando el nombre de Alejandro Gaviria en la baraja de presidenciables de cara a 2022. Su nombre no es desconocido, pues fue parte de la cartera de la salud en el gobierno de Santos y su postulación se dio en un principio por el senador liberal Iván Darío Agudelo.
Gaviria es el candidato perfecto para un sector social y político que se puede acomodar a su tono tranquilo y reflexivo. Y aunque desde la Coalición de la Esperanza le hicieron el guiño, el senador Robledo es enfático en decir que no pueden compartir escenario político, ya que fue él quien lideró los debates más importantes cuándo Gaviria era ministro.
El senador Robledo es coherente en su manera de ver y hacer la política; por eso, aunque la Coalición de la Esperanza es la única capaz de sacar al país de los extremos y darle un aire a las maneras de hacer política actualmente, es importante recordar las razones por las que Alejandro Gaviria no debe estar en el mismo equipo:
- Ser el ministro peor calificado de la cartera Santos: en una encuesta realizada por la revista Dinero y la firma Invamer Gallup, a unos 200 empresarios del país, Alejandro Gaviria fue el ministro que recibió la peor calificación: 2,72.
- Dado su desconocimiento del sector, dijo que en Colombia no había crisis de la salud ni crisis en la prestación de los servicios.
- Reajustó la UPC a las EPS del Régimen Subsidiado: sin medidas adicionales para que ese reajuste llegara a los prestadores de servicio, de hecho, apalancando financieramente a los defraudadores de la salud y dejando a clínicas y hospitales a la deriva.
- Quería limitar el derecho constitucional a la tutela como medio de defensa de la población, colocando adicionales trabas administrativas para acceder al procedimiento.
- Aseguró que los “riesgos asociados a la salud por el asbesto no son certeros”.
- Él y su esposa tenían vínculos personales con empresas ligadas al sector salud, lo que constituía un impedimento de Gaviria para participar de ciertos debates.
- Contrapuso una acción para que Camila Abuabara no pudiera ser atendida en el exterior, negándole su derecho fundamental a la vida.
- Fracasó como administrador de Caprecom, Cafesalud y Saludcoop, cuyas quiebras han dejado a millones de colombianos con un pésimo servicio de salud
Considero que el exministro Gaviria siempre antepuso los intereses económicos de una pequeña élite a la que representaba y con sus decisiones hizo que la salud en Colombia fuera cada vez más un negocio y menos un derecho. Sin embargo, en contraste, al él contar con todos los recursos económicos, sí pudo acceder al mejor tratamiento contra el cáncer, toda una paradoja.
Por eso, el rechazo del senador Robledo es más que justificado ante un personaje que le hizo tanto daño al sistema de salud del país y que en los debates que fue citado no respondió a las preguntas, sino que, por el contrario, pasó a las descalificaciones y al irrespeto. Si así lo hizo como ministro, ¿cómo sería como presidente?