Mediante derecho de petición suscrito por un importante grupo de empresarios del departamento de Nariño, dirigido al doctor Julián Molina Gómez —en su calidad de director de la Superintendencia del Subsidio Familiar— y fechado en octubre 19 de 2020, solicitan nuevamente, copia del Plan de Mejoramiento (PDM) ordenado por esa entidad a la Caja de Compensación Familiar de Nariño debido a “un escandaloso déficit” y el consecuente “riesgo” del futuro financiero de la entidad. De acuerdo a criterios de los empresarios nariñenses “la ciudadanía tiene derecho a conocer el mentado plan para que no se convierta en una burla más del manejo administrativo de la caja”.
En este derecho de petición se le recuerda a la SSF que mediante Resolución No 0335 de septiembre 20 de 2020 se “adopta la Medida cautelar de Vigilancia Especial para la Caja de Compensación Familiar de Nariño – Comfamiliar de Nariño”, designándose a la doctora Ana María Gáfaro Martínez como Agente de Vigilancia Especial. Preocupa al gremio empresarial que hasta la fecha no se conozca públicamente este plan de mejoramiento por cuanto la situación financiera de la caja es preocupante, toda vez que se deben asumir, entre otras, millonarias demandas por procesos judiciales en su contra producto de demandas laborales por despidos o desvinculaciones profesionales sin los requisitos de ley.
Para ellos es sumamente preocupante que estos procesos judiciales asciendan a la suma de $ 827.487.916, pero igualmente expresan su preocupación por la existencia de otras demandas de carácter laboral que consideran como “un detrimento patrimonial” que obedece a “negligencia caprichosa del director”: “Hay otros procesos judiciales como el del Sr. Oscar Wilson Reyes Llaín; con Sentencia de la Corte Suprema de Justicia por valor de $ 571.558.680 por salarios debidamente indexados, más las prestaciones legales y convencionales también indexadas desde hace catorce años. Obligaciones no pagadas las cuales seguirán aumentando dicho valor, cada día; igual sucede con el reintegro a su trabajo al cargo de “subdirector o a otro, “de igual o superior categoría”, que tampoco se ha cumplido. Es un detrimento patrimonial que se seguirá causando, en contra de la caja, por negligencia caprichosa del director”.
Estos empresarios nariñenses ponen el dedo en la llaga al dejar en claro que debido a la actual situación de la caja y “al manejo administrativo y financiero de la Caja de Compensación de Nariño, se desprende de la resolución antes aludida, que existe peligro eminente para cumplir con el pago de la cuota monetaria, que es el objetivo misional de las cajas y del sistema del subsidio familiar”. Igualmente, destacan los empresarios la difícil y caótica situación financiera de la Caja de Compensación de Nariño por cuanto “es evidentemente claro, que el futuro de la entidad está en “riesgo” si nos atenemos al valor de los pasivos que se encuentran por un valor de $ 253.314.242.979 y un patrimonio de $ 28.000.000.000, según lo consignado en los antecedentes y en consonancia con la Resolución de la Medida Cautelar tomada por su despacho”. Cifras que demuestran por si solas la crítica situación financiera de la Caja de Compensación Familiar de Nariño.
Debido a las situaciones expuestas los empresarios nariñenses, movidos por su preocupación y por el destino incierto de la caja, solicitan: “Queremos saber si el PDM se presentó y aprobó por el consejo directivo y el director de la caja, en los términos legales señalados en la Resolución 0335 a la Dra. Ana María Gáfaro Martínez y si ella, como Agente Vigilante, lo aprobó o lo ha presentado a usted para su aprobación, y en su criterio, sí cumple con las condiciones para que la caja vuelva a su normal funcionamiento administrativo y financiero sin necesidad de aplicar las “medidas drásticas” que prevé el acto administrativo: “intervención” o “liquidación”.
En su solicitud los empresarios nariñenses formulan su profunda preocupación por el destino inmediato de la Caja de Compensación Familiar de Nariño. De hecho, en uno de sus apartes expresan: “Si se compara el patrimonio líquido existente con el capital que tuvo la empresa, cualquiera podrá preguntarse ¿a dónde fue a parar el dinero que causó el escandaloso déficit?, ¿con qué dinero se va a cubrir semejante hueco fiscal?". Y solicitan que se “ponga en conocimiento de la Fiscalía General de la Nación para que investigue los hallazgos penales que encontró la Contraloría General de la República, como los que se desprenden de los mismos considerandos de la medida cautelar y llame a juicio a los responsables…”.
La palabra la tiene el doctor Julián Molina Gómez, director de la Superintendencia del Subsidio familiar, y la Dra. Ana María Gáfaro Martínez, en su calidad de Agente de Vigilancia Especial de la Superintendencia. Los empresarios de Nariño tienen todo el derecho de conocer la verdadera y real situación de la Caja de Compensación Familiar de Nariño por cuanto en la Resolución No, 0335 la SSF concluye que “consideramos necesario profundizar en el conocimiento y análisis de las causas de tal deterioro…”. Pues que se profundice, que se investigue, que se hagan conocer las anomalías, que se haga conocer el detrimento actual de la caja. Que no vaya a terminar todo en un simple chapuceo y nada más, la situación es grave y delicada, la caja hace aguas por todos sus flancos y su capacidad de pago es inocultable. Señores de la SSF, dígannos con claridad las verdaderas causas del debacle financiero y administrativo de la Caja de Compensación Familiar de Nariño, es su obligación y su deber legal y ético.