Por iniciativa de la Policía, el alto mando de las Fuerzas Armadas sostuvo este martes una reunión para evaluar las nuevas condiciones de seguridad del ministro de Defensa, Iván Velásquez Gómez, vinculado a una investigación penal en Guatemala por decisión de un fiscal que está fuertemente cuestionado en su país y en Estados Unidos.
Además de los comandantes y jefes de Estado mayor de las fuerzas, fue invitada a la reunión la directora de la DIJÍN, brigadier general Olga Patricia Salazar Sánchez. El papel de la oficial es fundamental porque ella, además de comandar un cuerpo especializado de policía judicial es la cabeza de la Interpol en Colombia. El papel de la Interpol será fundamental en caso de que el fiscal José Rafael Curruchiche decida ir más allá del anuncio de “ir por Velázquez”, como lo afirmó durante la rueda de prensa en la que habló sobre los alcances de sus actuaciones procesales.
A juicio de los oficiales, el caso necesariamente afecta el entorno del ministro y hace que incluso su esquema de seguridad sea revisado.
La reunión fue llevada a cabo mientras la Cancillería alistaba instrucciones para la embajadora de Colombia en Guatemala, Victoria González Ariza, llamada a consultas en Bogotá. Simultáneamente, el presidente de Guatemala, Alejandro Giamattel, le echó más leño a la hoguera al afirmar en España que Petro actúa con la lógica de un guerrillero y que la liberación de personas que cometieron crímenes durante el conflicto armado en Colombia muestran que el concepto de divisiones de poderes es muy distinto al que rige en el suyo.
Le podría interesar: Reversazo definitivo de Mindefensa: los viejos K-FIR van para el taller
