Cuando cumplió 50 años de vida, el economista Álvaro Londoño dijo públicamente que tenía que cambiar de vida. Ya estaba cansado de la rutina y decidió dar por terminada su carrera en Naciones Unidas, en donde llevaba trabajando alrededor de dos décadas. Entonces, creó junto con su esposa Elena y sus cuatro hijos un emprendimiento que mezclara las pasiones de su familia tradicionalmente heladera: meses después nacería helados Popsy.
Así, en un pequeño local sobre la avenida 68 de Bogotá, en febrero de 1981, nació su primer local de helados. Ese día había filas de cientos de personas queriendo probar uno de los 10 primeros sabores con los que se lanzaron al ruedo, convencidos de que alcanzarían el éxito en la capital. Dos años después de iniciar el emprendimiento y de invertir el capital familiar, los Londoño abrieron su primer punto de venta con el primer drive thru que tuvo el país.
El éxito en la recepción de su producto dejó a la familia desconcertada por sus rápidos resultados. Hoy la cadena cuenta con más de 200 puntos de venta en 46 ciudades colombianas y tiene presencia en el exterior, con cerca de 50 puntos en países vecinos como Perú y Panamá. La empresa genera actualmente 1.800 empleos.
La clave que ha utilizado Popsy para mantenerse vigente durante estas cuatro décadas es la innovación: hasta el momento han lanzado al mercado más de 100 sabores de helado. Por eso, una de las actividades en la celebración de este aniversario apunta a permitirles a los consumidores elegir aquellos que añoran. Por ejemplo, el merengón de guanábana que se lanzó al mercado en los años 90 fue elegido por los clientes como el primer sabor de celebración y estará en las heladerías por tiempo limitado.
Por otro lado, en un garaje en el barrio San Joaquín de Medellín, dos hermanos de apellido Saldarriaga jugaban a ser heladeros cuando eran chiquitos. Tendrían 5 años para ese entonces. En dicho espacio, de propiedad de quien fuera su abuelo, había una máquina de helados olvidada que los niños revivían con su imaginación cada tarde después del colegio.
Con los años, la realidad de los hermanos heredó el amor a los helados con la que su imaginación se entretenía. En 1971, cuando ya eran adultos, fundaron un emprendimiento que tuviera algo de novedoso en la heladería: helado blando con cobertura de chocolate, algo que, para ese entonces, fue todo una sensación. Así nació la empresa Helados Mimo’s, una de las heladerías favoritas para los colombianos.
Su primer local, ubicado en la carrera 70 de Medellín, históricamente conocido como el “Mimo’s de la 70” se volvió un punto de encuentro para grandes grupos de adolescentes y también de estudiantes de colegio y universidad, después de clases.
Para su inicio la familia adquirió maquinaria especializada que cumplía con los requisitos del producto. Pocos años después importaron de China los equipos para llevar su idea de negocio un paso más allá. Así, Mimos fue ampliando su portafolio con otros productos, además de convertirse en pioneros en la línea de helado de soya, la dietética y la deslactosada entre otras. Posteriormente, Mimos se convertiría en el embajador de la heladería de McDonald en Colombia.
Mediante el modelo de franquicias, la marca empezó a crecer, no sólo en Medellín, sino también en muchas otras ciudades del país. Sin embargo, era claro que, en un entorno tan competido de marcas globales, era necesario encontrar un valor diferenciador, único, que las marcas extranjeras no pudieran tener: alianzas con otros productos colombianos. Pronto, productos como Chocolatinas Jet o Chocorramo serían ingredientes fundamentales para algunas de sus recetas. Fue el interrelacionamiento cordial entre casas de dulces lo que llevaron a Mimo’s a tener hoy 144 locales, 77 propios y 64 en franquicia tanto en Colombia como México, Perú y Ecuador.
Fue también la capacidad de aliarse que llevaron a la creación del grupo Conboca, que nació por la fusión entre Mimo’s, Kokoriko y Andrés Carne de Res en 2014 y que llevó a internacionalizar cada uno de los productos en coalición y participación colectiva.
De acuerdo con datos de Euromonitor, el mercado de helados en Colombia sumó US $535,1 millones en 2020, registrando un crecimiento promedio anual de 3,1% entre 2016 y 2020.
El Grupo Conboca, dueño de la marca Mimo’s, reina en las heladerías con 35,7% de participación, mientras que Nutresa, con Crem Helado, es el líder del comercio de envasados alcanzando 43,8% del negocio. El segmento de retail está compuesto en el país por 1.302 heladerías y mueve alrededor de US$171,9 millones al año que, fuera de Conboca, las compañías que compiten son Popsy, que está en segundo lugar con 14,3% y Yoguen Früz, que cuenta con 4,5%, de mercado.
Le puede interesar:
$9.000 pesos por una cebolla y una zanahoria: el descaro de Carulla en Bogotá