Cuando Pablo Escobar mataba a un candidato a la presidencia, o a un magistrado o periodista, celebraba poniendo la balada Chiquitita del grupo Abba y le pedía a Popeye, su hombre de confianza, que le armara un porro y le trajera una Heineken, la única cerveza que tomaba. Animado por los efluvios del bareto se quedaba mirando el vacío con una sonrisa y, súbitamente, anotaba en su libreta roja el próximo nombre que sería borrado de la faz de la tierra. Después ponía, sin importar el escondite en donde estuviera, un casete de Raphael, Sandro o José José, los poetas que lo inspiraban a crear atentados, secuestros o asesinatos. Esto lo cuenta de viva voz Popeye.
Desde 1986 hasta el fin del capo en 1993, Popeye lo acompañó en cada rumba con Juan Piña, Joe Arroyo o hasta la Sonora Matancera. Lo vio mantenerse frío ante la muerte de Gustavo Gaviria, su socio y primo. Cuando supo que éste se había arrodillado ante la policía para suplicar por su vida, Pablo Escobar se hincó de hombros y murmuró que sólo los cobardes morían con miedo. Vio al Patrón entre reinas de bellezas, senadores, banqueros y políticos. Lo vio ganándole la guerra al gobierno de Gaviria en la cumbre de La Catedral y llevarse un millón de dólares para gastárselas en una sola noche en Río de Janeiro a punta de helicópteros, limosinas y todas las garotas imaginables. Supo que el único nombre que no había sido tachado en su libreta había sido el del presidente Belisario Betancurt. En la cárcel de Cómbita Popeye vio a Miguel Rodriguez Orejuela. el archienemigo de Escobar, rezarle a su alma para que no lo extraditaran a Estados Unidos.
Popeye arrepentido es el canal de youtube que el sicario abrió después de pagar 25 años de cárcel y reconocer haber asesinado a 200 personas. No quiere llevarse un solo guardado a su tumba y decidió contarlo todo lo que puede recordar del Cartel de Medellín. Sus videos quincenales tienen cerca de 200 mil visitas y el canal cuenta con 35 mil asiduos suscriptores.
Popeye se reiventó youtuber para conectarse con sus seguidores que le sobran en Chile y Argentina. Contesta las cerca de 10 mil preguntas mensuales que le formulan desde todas partes del mundo, sobresaliendo su comunicación con los más fanáticos, que están en el cono sur.
Abi Gudino, de Israel, le pregunta ¿Quién era el verdadero jefe del Medellín?: Jorge Luis Ochoa, hoy acaudalado empresario que vive tranquilamente en Medellín, responde. Por orden suya Pablo arma, el 11 de noviembre de 1981, el grupo armado MAS que buscaba la liberación, a sangre y fuego, de su hermana Marta Nieves, la menor de la dinastía Ochoa Vásquez.
Alfredo Gaume Aguirre, desde Buenos Aires, pregunta si el Patrón conoció Argentina. No, pero adoraba el tango. Cuando sonaba Sangre maleva en la versión de Oscar Larroca, era el anuncio de que el patrón estaba decidido a matar a alguien. Disfrutaba con Leonardo Favio y las películas de Libertad Lamarque.
Mario Zegarra, de Lima, y cual era la comida preferida?. El arroz con huevo después de un baretico.
En medio de los relatos pasmosos intenta dejar la misma enseñanza: el que no conoce la historia está condenado a repetirla y cierra sus videos con la música de Chiquitica y de Sangre maleva, las canciones preferidas de Pablo Escobar para celebrar la muerte y la vida.
La leyenda de Popeye, apaciguada por el cuarto de siglo que vivió entre rejas, se ha reforzado gracias a la serie El patrón del mal que se ha trasmitido en 60 países.
Las pausas antes de darle rienda suelta a las historias que duran entre 10 y 20 minutos, las aprovecha para hacerle publicidad a los dos libros que inspiró: El verdadero Pablo y Sobreviviendo a Pablo Escobar, de las que anuncia próximas traducciones al portugués, italiano y al inglés.
Popeye no es un youtuber cualquiera: es el testigo vivo más próximo al imperio de horror que fundó Pablo Escobar. Su público, cada vez más creciente, no disimula su admiración. Desde ya, aupado por sus hinchas, anuncia un tercer libro y una película sobre su vida que también sería, cómo el mismo lo ha dicho, una película sobre la historia de Colombia. Y razón tiene.