John Jairo tenía seis años y cuatro hermanos. Para espantar el aburrimiento de las tardes de domingo en Yarumal los Velásquez Vásquez jugaban al escondite. Él era el más pequeño, el que más guerra le daba a doña Aura Ofelia, su madre. Una tarde ella escuchó los gritos suplicantes de John. Salió corriendo al patio y lo vio amarrado a un palo, cercado por las lenguas de fuego que salían de unos bejucos secos que habían encendido sus propios hermanos como penitencia por haberse dejado encontrar. Aura Ofelia llegó justo a tiempo para impedir que el pequeño Popeye se hubiera muerto sin conocer a Pablo Escobar.
En los largos días de la cárcel Modelo de Bogotá John Jairo le contaba estas historias a Maritza Neila Willis Fontecha, la mujer que estudió Lenguas Románticas en la Universidad Nacional y neurolingüística durante 2 años. Estaba asistiendo espiritualmente a dos reclusos norteamericanos cuando conoció a Popeye. Fueron tantas las anécdotas que a Maritza le alcanzó para escribir un libro: Mi vida como sicario de Pablo Escobarpublicado por la editorial norteamericana Harper Collins.
Popeye firmó el contrato de la edición de su autobiografía. Se esperanzó con la promesa de que sería bastante probable que el libro resultara siendo adaptado al cine, incluso hablaron de una cifra, 1’500.000 dólares. Pero esos proyectos naufragaron cuando Popeye recuperó su libertad en agosto del 2014.
En un arranque de ira empezó a instigar a los 30 mil fans que a principios de 2015 tenía en Youtube para que la eliminaran de Facebook y la insultaran. Popeye estaba convencido que Willis Fontecha y su hijo Daniel se había apoderado de su perfil de Facebook y que presuntamente cobraban entrevistas en su nombre. Velásquez Vásquez no recuerda haber autorizado la publicación de sus secretos más oscuros. En este video está el desahogo del ex presidiario:
En el libro, Popeye, enfurecido porque Wendy Echavarría, una joven que había sido amante de su patrón, se negaba a salir con él, el gatillero la mató. En la versión que hasta ahora era la oficial, Pablo Escobar la había dado la orden de matarla al enterarse que su sicario se había enamorado de ella. Además, en el libro se deja entrever que el papel de John Jairo Velásquez Vásquez dentro de la estructura del cartel de Medellín era menor.
Según Willis Fontecha, Popeye llamó a los representantes de la editorial Harper Collins a amedrentarlos. En un audio que tiene la lingüista se deja escuchar la voz del sicario diciendo que no los demandaría por la usurpación de los derechos de autor porque la fiscalía de Colombia no lo respaldaría pero que, para hacerse respetar, iría a la sede de Harper Collins con su propia fiscalía ya que esa sí es efectiva porque podría llegar hasta la tercera instancia. De comprobarse esta intimidación Popeye pondría en peligro el privilegio de la libertad condicional de que goza.
Popeye amenaza con demandar porque se siente calumniado. Mientras tanto aúpa a sus más de 100 mil fans que ya tiene en redes sociales y hasta se siente confiado para decir que aspira pronto a ser senador. Viendo las encuestas que inmediatamente se hicieron en Twitter queda claro que la gente lo votaría a él antes que a Timochenko, el jefe de las Farc.
Este es el audio de La W Radio: