No es fácil saber cuántas razas distintas de perros hay en el mundo. No obstante, la Federación Cinológica Internacional, que es el organismo que se encarga de regir y fomentar las normas de cuidado y crías de perros en todo el mundo, estima que existen 343 razas de perros distintas en el planeta. Lo que sí es fácil de decir es que, de los cientos de ejemplares descendientes del lobo, el Pit Bull es el perro más amigable, juguetón y confiable.
Una de las características físicas más agradables de esta peluda y musculosa raza es su pelaje corto y resplandeciente, que invita a la caricia incluso a quienes no son muy afectos a los perros. Ciertamente es muy agradable acariciar el lustroso y relajante pelaje de un Pit Bull.
Este canino de origen antiquísimo que se remonta a la Gran Bretaña del siglo XIX, de fenotipo atlético e imponente, es entusiasta, resistente a las enfermedades y divertido; el Pit Bull es un perro con altos niveles de inteligencia que rápidamente entenderá todo aquello que se le pida y que se le proponga para una convivencia armoniosa. Es decir que se trata de un perro complaciente que disfruta realizando tareas, y aunque no lo parezca y suene paradójico, no es un buen perro guardián, pues suele ser amigable con los extraños.
Al ser un perro inteligente, atlético y activo, se le puede aprovechar para enseñarle actividades que combinen las órdenes de obediencia y el ejercicio físico como el trote- que le servirá también al propietario para su salud física y mental-, algo muy recomendable para esta raza.
Por lo general, estos perros son amigables, juguetones y confiables con adultos y niños. De cualquier manera, nuca se debe dejar a un niño pequeño a solas con un Pit Bull porque eso es una invitación a los accidentes.
Néstor Raúl Holguín, Médico Veterinario y Zootecnista, de la universidad del Tolima, dice que el pitbull tiene un temperamento más estable que el promedio de los perros. En las evaluaciones de comportamiento canino, el Pit Bull casi siempre obtiene mejores calificaciones que razas tales como el Beagle y el Golden Retriever. Un perro no es bueno ni malo. Ellos no tienen conciencia como nosotros los humanos. El comportamiento de estas razas depende de la crianza y el cuidado que les den sus propietarios”, objeta el médico Holguín.
Estas palabras hacen recordar la sentencia o aforismo que hace César Millán (El Encantador de Perros), fiel defensor de estos animales:” No hay perros agresivos, sino humanos ignorantes”.
A pesar de que lo medios de comunicación en su frenesí noticioso han pretendido satanizar y venderle a la sociedad una mala imagen de este noble perro por los recientes ataques a niños, cabe aclarar que estos lamentables episodios son ocasionados por la crianza, el trato y el cuidado inadecuado y la irresponsabilidad de algunos dueños. Sin embargo este tipo de ataques puede suceder con cualquier otra raza de perros. Por ejemplo: una encuesta de Dognition demostró que de 4.000 dueños de perros a los que se les preguntó qué tan agresivas eran sus mascotas, los chihuahuas – catalogados como dóciles- tuvieron mayor reporte de comportamiento violento.
De hecho la ley 746 de 2002 en el artículo 108-f del Código de Policía y Convivencia Ciudadana dice:
“Se considerarán perros potencialmente peligrosos aquellos que presenten una o más de las siguientes características:
- a) Perros que han tenido episodios de agresiones a personas u otros perros;
- b) Perros que han sido adiestrados para el ataque y la defensa;
- c) Perros que pertenecen a una de las siguientes razas o a sus cruces o híbridos: American Staffordshire Terrier, Bullmastiff, Dóberman, Dogo Argentino, Dogo de Burdeos, Fila Brasileiro, Mastín Napolitano, Pit Bull Terrier, American Pit Bull Terrier, De presa canario, Rottweiler, Staffordshire Terrier, Tosa Japonés”.
Por estas razones, un Pit Bull con un propietario responsable que le dé buena crianza, cuidado y buena socialización desde cachorro, puede crear una mascota con vínculos especiales que se lleve muy bien con niños y adultos y otros animales, al punto de poder ser un perro excepcional, ya que el Pit Bull es un can bello, paciente, noble y tolerante.
