Las imágenes que veremos a continuación jugarán con nuestra percepción y serán un placer para quienes no sabemos de arte y nos partimos diariamente la cabeza intentando entender alguna -o la mayoría-, de cosas que nos venden como arte contemporáneo.
Hay días en los que estoy de acuerdo con la crítica mexicana Avelina Lesper quien dice que el arte de hoy “son ideas, no obra; todo el mundo es artista; cualquiera cosa que el artista designe como arte es arte”. PERO INSISTO ALGUNOS DÍAS.
En medio de las opiniones de lo “Qué es arte o no”, “de Quién sabe de arte o no” está el hiperrealismo que podríamos llamar la competencia de la fotografía pues busca reflejar la realidad lo más fiel y objetivamente posible, y no hay que ser un estudioso del arte para apreciar los detalles de sus creaciones.
Los hiperrealistas reproducen los tonos de la piel, sus matices, arrugas, las hebras de cabello, poros, lunares, vellos. En fin, son unos maestros en el detalle.
Ejemplo de ello es el polaco Rafal Bujnowski quien se hizo un autorretrato y después lo fotografió. Presentó esa imagen para obtener la visa de Estados Unidos y ninguno de los trabajadores del consulado descubrió que era una pintura. Le dieron la visa con un dibujo hecho con lápiz y papel
El australiano Robin Eley tarda entre dos y ocho semanas en terminar cada retrato.
El autodidacta italiano Franco Clun, trabaja sus dibujos instantáneos a lápiz.
Ray Hare ha sido escogido para hacer retratos para las colecciones privadas de los canales NBC, Fox Network y ABC. Su técnica es pintura acrílica sobre lienzo.
Bryan Drury lo llaman el retratador de los defectos de los ricos. Trabaja óleo sobre madera y se centra en las características puramente biológicas (arrugas, canas, poros abiertos).
En óleo sobre tela el mexicano Omar Ortiz, detalla y reproduce los tonos de la piel y sus matices, que son características principales de su trabajo.
La frase con la cual el dominicano Kamalky Laureano define su obra es “El arte imita a la vida, y por lo tanto debe estar viva.” Refiriendose a la imitación tan exquisita que intenta hacer de lo que lo rodea en su arte.
Roberto Longo, estudió escultura pero ha dedicado su vida a la pintura. Con su técnica de carbón sobre papel para montaje crea imágenes tridimensionales.
Las esculturas de Ron Mueck tiene detalles tan reales que si su tamaño fuera el de personas lograría confundir a quien las ve.
Christina K con lápices de colores sobre papel café, realiza dibujos tan detallados que juega con nuestros sentidos y nos hace creer que son fotografías.