Pintar es poder decir la verdad de forma directa y poderosa

Pintar es poder decir la verdad de forma directa y poderosa

Becerra Torres, más conocido en el mundo artístico como “Toleddo”, dejó la carrera militar para dedicarse de lleno al arte. Esta es su historia

Por: Manuel Tiberio Bermúdez
mayo 24, 2017
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Pintar es poder decir la verdad de forma directa y poderosa

No le fue fácil decidirse por una de las dos pasiones que alientan su vida: la milicia y la expresión pictórica. Pero como siempre, uno no hace lo que quiere en la vida, sino lo que la vida le va acercando a lo que ella quiere que uno haga.

Acomodó su mundo a las dos cosas que le han servido de  motivo para caminar su existencia. En lo militar llegó hasta el grado de capitán. En la pintura aún viaja la vida plasmando lo que sale desde su alma, en ocasiones atormentada por los recuerdos de los momentos vividos,  y otras con la tranquilidad del artista que sabe que la vida está construida de felicidad y dolor.

Nuestro invitado en esta oportunidad es Henry Becerra Torres, más conocido en el mundo artístico como “Toleddo”. Con él vamos a recorrer los recuerdos y acercarnos más a su vida como ser humano y como artista.

Nació en Bogotá, una ciudad en la que confluyen todas las diversidades de nuestro país y del exterior. De su niñez, recuerda sus vacaciones a casa de su abuela “Julia”; en donde la libertad del campo abierto le prestaba alas a su imaginación y era el espacio amplio para los juegos.

Recuerda también los viajes a diferentes ciudades del país a visitar a su padre quien trabajaba fuera de la capital: Bucaramanga, Cúcuta, Barranquilla. Estos fueron algunos de los sitios que se quedaron para siempre en su memoria, así como algunas regiones de Boyacá y Cundinamarca.

El llamado del ejército

 Mirar lo que pasa en su país hace que se despierte en él el llamado del servicio, y es entonces cuando el guerrero que le habita le impulsa a elegir la carrera militar. Quisimos saber, qué motivaciones tuvo para ingresar a formar parte del Ejército Colombiano.

“La vocación de servicio; el poder aportar a una nación que para la época en que ingresé al Ejército Nacional, año de 1993, se había recrudecido el conflicto interno y estaba llegando a las goteras de Bogotá”.

“Hasta ese momento había podido disfrutar el poder andar con mi familia por las diferentes carreteras de Colombia sin que se presentaran situaciones de violencia o miedo, pero ya para ese momento era imposible salir a los llanos, disfrutar del campo en Boyacá o Cundinamarca, o transitar, sin desconfianza, por las vías del país”.

“Sentí que nuestra nación se hacía invivible y quería aportar. Cuando terminé mi preparación castrense en la Escuela Militar de Cadetes y ante la pregunta de escoger tres unidades para ser trasladado, sin duda alguna respondí: “cualquier unidad militar en los llanos orientales”.

“Terminé trasladado al Batallón de Selva de Infantería Nº 44 “Ramón Nonato Pérez”, ubicado en Tauramena (Casanare), “llano adentro”. Debía presentarme en Yopal (Casanare), y logré así lo que tanto quería: iba a caminar y a conocer la inmensidad del llano, pero conseguí más porque conocí la idiosincrasia de los “pijas” y me enamoró tanto que en mi segundo traslado a los llanos Orientales, en Villavicencio (Meta),  me casé con una llanera. Aún hoy no pierdo oportunidad de viajar allá”.

¿Qué circunstancias lo llevan a encontrarse con el arte?

Durante toda mi vida el arte fue para mí parte fundamental. Participé activamente en cuanto escenario artístico se presentó durante la colegiatura. Luego estudié artes plásticas durante cuatro semestres, y fue truncada la formación cuando acudí al llamado de la carrera militar. Aproveché las vacaciones para adelantar cursos y talleres con profesores de arte, lo cual me mantenía actualizado en la materia. Definitivamente retomé las artes plásticas cuando por circunstancias operacionales me vi inmerso en una investigación penal que me marcó profundamente.

“Cuando mi padecimiento aumentó, pronto me di cuenta de que había dos maneras de dar respuesta a esta situación: reaccionar con amargura o bien transformar el sufrimiento en su fuerza creativa. Escogí esta última”.

¿Por qué la pintura y no otra expresión artística?

“El crear de la nada con mis manos e imaginación me deslumbra. Cada vez que existe un nuevo proyecto me apasiona, un elemento que pinte cobra vida en mis manos, cualquiera que sea. Respeto cualquier otra expresión artística porque cada artista es un mundo que se debe admirar y apoyar, pero no cambiaría la satisfacción del poder plasmar un sentimiento en un lienzo y que cada espectador busque una interpretación personal. Pintar arrebata mis pensamientos, me exige cada vez más y me da las satisfacciones personales que nunca pensé que tendría”.

¿Qué fue lo primero que hizo como pintor?, ¿qué críticas recibió por lo hecho?

“Un paisaje de un atardecer en la playa, un sol que muere en el horizonte con un mar semipicado y una palmera a la orilla de la playa ondeando con el viento. El cuadro fue vendido a las dos semanas.

Las críticas fueron fundamentales al inicio de mi carrera ya que fueron positivas y cuando fueron negativas buscaron la orientación y el mejoramiento de mi propia técnica. Esas palabras de aliento fueron claves en la continuación de los estudios de arte, ya que cada vez que realizaba una obra mostraba una nueva faceta y un continuo redescubrimiento artístico".

¿Qué fue lo primero que hizo que haya sido visto por el público?, ¿qué le dio satisfacción personal?, ¿en qué momento decide tomar la pintura como oficio de vida?

"La obra que marcó el  inicio de mi carrera como artista fue el autoretrato llamando “Equilibrio”, el cual me obligó a transformarme. Debía de cambiar mi formación militar y quitarme de la cabeza la milicia, para meterme en una nueva formación profesional pero ya como artista plástico.

Hice un auto análisis en busca de mi equilibrio emocional, familiar y profesional, tener que decidir que iba a ser de mi vida ya que no podía continuar siendo un militar de carrera. Estaba por delante mi familia y había que continuar, había que surgir y demostrarles a ellos y a mí mismo que esto no era el fin.  De esta reflexión salió lo que es hoy mi obra “Equilibrio” la cual es mi logotipo y la imagen del proyecto artístico “Tragedias y Reconciliación 55 años de Víctimas”, el producto final lo expreso en la ficha técnica de la obra en donde dice:

Esta obra muestra la capacidad de auto superación personal, todo hombre en determinado momento de su vida experimenta un desplome total o parcial de su carrera, pero surge de la nada su grandeza y fortaleza, apoyado en lo espiritual recupera la creencia en su Dios y en sí mismo, ahí es cuando un nuevo ser anónimo  brota con un proyecto de vida, para ser ejemplo de reconstrucción y transformación personal”.

¿Cuáles son las motivaciones para su pintura?

"El poder expresar una realidad. Pintar tiene una ventaja y es el poder decir la verdad de forma directa y poderosa. Me motiva el poder realizar obras que confrontan la realidad y aportan, como en este caso, a la reconstrucción y reconciliación humana. Somos por naturaleza seres conflictivos y una manera de perpetuar en la historia la no ocurrencia de los actos violentos entre unos y otros es plasmarlo en una obra que muestra seres humanos víctimas, crear conciencia es difícil, pero ese es mi aporte, mi granito de arena".

¿Cómo define su trabajo como artista?

"Como una búsqueda constante de lo interno y oculto de las personas. Cuando realizo una obra lo que busco es plasmar a ese ser de la forma más real posible, pero con la dificultad de escudriñarle en su interior  y en lo más profundo para saber ¿quién es?, ¿que hay dentro de esta persona? y ¿qué quiere salir y que evita ser visto?. Puede existir desde una bomba poderosa hasta un sublime pensamiento de amor o compasión, la obra no está terminada hasta que exista adherida esa significancia”.

¿Por qué la temática de la paz y la reconciliación  es una especie de constante en su trabajo?

“El camino a la paz es una realidad. Todo conflicto, por pequeño o grande que haya sido ha terminado. Esa es la constante de la historia del mundo. Nuestro país lleva 55 años de guerra y más de 8 millones de víctimas, cuántas víctimas más necesitamos o cuántos año más se requieren para que nos sentemos a negociar. No se trata si unos u otros van a la guerra o si unos u otros se quedan con la mejor o la peor parte o quien es que debe de sentar a los insurgentes y bajo qué términos se deben de someter porque yo soy más poderoso. ¡Aquí lo que más importa son las víctimas! Por la memoria de los muertos o en homenaje de sus sobrevivientes debemos de trabajar en la reconciliación nacional, en estos momentos vemos imágenes que por el rigor de la guerra eran impensables todos en pro de la paz, ¡o sea que sí es posible y viable!

Creo en la reconstrucción personal y social y que cada uno debe de aportar gotas y semillas ya que pronto podremos recoger lo sembrado, dentro de otros 55 años este será otro país y otras generaciones, que hablaran de lo ocurrido y todo será historia, mas no vivirán este mismo conflicto".

¿Cuál fue la primera exposición en la que pudo sentir orgullo por lo que hace?

"La exposición con MAI Colombia que se realizó en Ibarra (Ecuador) – Exposición Pictórica “Tendencias contemporáneas”, la primera vez que salió internacionalmente una obra del proyecto “Tragedias y Reconciliación”, un momento único porque el sacrificio económico y el trabajo arduo dio sus frutos y más cuando la obra insigne “Equilibrio” fue portada de los folletos y pancartas de la exposición”.

¿Qué quiere decirles a los que miran su trabajo artístico? ¿Oculta algunas claves  su trabajo?

“Que el trabajo es fruto de la persistencia y la constancia, que en estas obras se encuentra plasmada una realidad nacional que debe de conocerse. Son historias y hechos reales que le ocurrieron desde la niñez a estas víctimas, que de una u otra forma debemos de apoyar las iniciativas que buscan dar por fin terminado este conflicto, imposible seria pensar seguir otros 55 años de violencia. Que en estos momentos somos los únicos responsables de dar por terminado el odio y el rencor, yo soy hijo de la violencia, mi esposa casi sufre el reclutamiento forzado perdimos mucho y no queremos perder más!

A pesar de perder mi carrera como militar, encontré que todo es posible, que nada está acabado, que quien se conoce de verdad sabe sobre sus capacidades y si no han podido encontrarse deberían de hacerlo, para darse una segunda oportunidad”.

¿Y de la pregunta si hay si hay claves  ocultas? Dentro de cada obra hay significados y siguiendo a la planimetría de los grandes artistas y genios del arte, si hay mensajes ocultos que tienen: primero la finalidad de buscar el acercamiento espiritual al ser Supremo, factor fundamental para obtener un equilibrio consiente, y segundo cuando hablo del “equilibrio interno” es tener bajo control aquello que cada uno oculta en lo más recóndito de su ser, aquello que no queremos que nadie sepa o conozca, pero que al fin y al cabo debemos de reorientar para estabilizar nuestras vidas porque ese tema o debilidad nos puede llevar a una vida de desgracia”.

¿Qué es para usted la prisión como artista y que le aporta o le quita a su arte?

“La prisión existe para mí de dos formas, la corporal, o sea, un individuo encerrado y castigado dentro de un centro penitenciario, y la intelectual o del ser,  la que le produce ese encierro a su mente, esta última es completamente franqueable si existe un programa en el Centro Penitenciario que apoye la creación de Proyectos de Vida. En mi caso puedo ser becado por la institución castrense para continuar los estudios de artes plásticas pues se reconocieron mis capacidades artísticas, esto fue fundamental para incrementar mi nivel intelectual y utilizarlo de dos formas: una como líder de un proyecto y otra para para poder estar preparado profesionalmente para mi salida en el mes de diciembre de este año,  sustituyendo de forma efectiva la carrera militar que por obvias razones se truncó”.

¿Para qué le sirve a usted el arte y para qué cree que le sirva a la sociedad y en concreto, la pintura?

“Para no olvidar, concientizar y hacer una crítica hacia la transformación. El arte tiene esas ventajas que no permite que los hechos o acontecimientos se olviden y que la sociedad produzca transformaciones ideológicas, como es el caso del “Guernica” obra de Pablo Picasso, desde al año 1937 nos recuerda el bombardeo de Guernica, una obra que trasciende en los tiempos y un icono del arte en el siglo XX, cumplió su misión de reconocer el espantoso sufrimiento que produce la guerra a los seres humanos.

¿Qué piensan los otros militares activos de su trabajo y como lo miran o califican por estar detenido?

“He tenido el apoyo más que suficiente para mostrar los resultados de mi Proyecto de Vida y en si el proyecto “Tragedias y Reconciliación”, ya que existe dentro de la fuerza el reconocimiento a un trabajo que se desarrolló para mostrar el nivel intelectual de sus hombre caídos en desgracia. Esto lo que muestra son las capacidades de los hombres que integran o integraron la institución su potencial académico y profesional no solo en los campos de la ingeniería, abogacía, arquitectura, táctica y estratégica e inteligencia, sino también en las bellas artes. Repito, he tenido un apoyo irrestricto, fui becado por el Comando del Ejército para adelantar estudios de artes y me terminaron de profesionalizar en el tema, soy y somos fruto de un programa de reconstrucción social con el objetivo de obtener proyectos de vida, he podido asistir con el permiso de mi juez natural a las exposiciones y se me ha prestado la seguridad porque este proyecto es un resultado de todos y vamos en el mismo camino, dar la oportunidad para la reconstrucción de vida”.

¿Qué quiere para su futuro como pintor?

“Obtener el reconocimiento a mi trabajo, ya lo otro llegara por añadidura, trabajo de 6 a 7 días  a la semana y durante 9 horas al día, el arte ya hace parte fundamental de la vida familiar, un orgullo colectivo que hemos podido desarrollar, el tiempo nos dará la razón y repito lo demás llegara por efecto.

La satisfacción es del grupo de apoyo MAI Colombia, Ejército Nacional, DICER, el equipo de Comando e Interdisciplinario del CMP, el apoyo del Juez Natural y la CSJ y por ultimo mi núcleo familiar y familia, quienes se les mostro el proyecto y lo avalaron, apoyaron y lo dieron como ejemplo de reconstrucción personal y social".

¿Cree que  puede vivir dignamente del arte en nuestro país?

"Una labor de sacrificio más no de abundancia económica, ya llegara el momento y más cuando el próximo año ya estaré en libertad al frente de todo para poder desarrollar algunos proyectos que están en remojo, pero el financiamiento es propio".

¿Si no fuera pintor que oficio le gustaría haber elegido para su cotidianidad?

“No veo mi vida sin un lápiz o pincel en mis manos, no estaría completa mi existencia sin esos medios, tendría mucha dificultad ya que esto es y ha sido parte de mi existencia, crear es mi pasión".

¿Una reflexión sobre el arte como un bálsamo para pasar el trago amargo de la prisión que debe cumplir?

"Es más profundo que el bálsamo, te cuento Manuel, que ya en diciembre de este año me voy con libertad por pena cumplida después de 5 años de detención, pero me voy no con las manos vacías ya que salgo con una profesión como artista plástico con una carrera ya en marcha y con una expectativas futuras muy esperanzadoras, o sea, que no fue solo un bálsamo si no una reconstrucción total de nuestras vidas.

Siento en estos momentos que soy un ejemplo de superación ante las personas que están en la misma situación y un ejemplo de proyecto de vida hecho una realidad ante el Ejército, para tu conocimiento cierro este año con una exposición individual en el mes de noviembre con 25 obras y 05 esculturas, y ya en diciembre, me voy a mi casa a continuar pintando.

Como ves nos transformamos de una forma total. La detención no me destruyó,  por el contrario nos fortaleció a mí y a mi familia. Es cierto, hay cicatrices pero ya no tan profundas y quizá alguna vez sean tema para un próximo proyecto artístico".

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