El Consejo Superior de la Universidad Tecnológica de Pereira ha presentado una denuncia ante el MEN: Los recursos de las universidades públicas se están destinando al programa Ser Pilo Paga, el cual está esencialmente concentrado en universidades privadas. El representante de los estudiantes de la UTP explica la denuncia en esta columna.
El programa Ser Pilo Paga fue creado durante la gestión de la ex-Ministra de Educación, Gina Parody, bajo el argumento de impulsar la calidad de la educación en Colombia y promover el acceso de los estudiantes de las clases sociales más desfavorecidas a la formación universitaria.
Para ser beneficiario de este programa de subsidios es necesario cumplir con ciertas condiciones: estar registrado en los niveles 1 y 2 del Sisbén, y reportar un puntaje mínimo en los resultados de las pruebas Saber 11, las cuales no están alineadas con los sistemas de admisión de las universidades públicas en Colombia, lo que genera un requisito adicional para ser admitido en cualquiera de ellas. Por el contrario, quienes solicitan ingreso a las universidades privadas no se encuentran con esta limitante, por lo que son admitidos directamente. No es difícil deducir de todo ello que esta situación no genera equidad en la asignación de los cupos financiados por el programa Ser Pilo Paga.
SPP es un programa bastante costoso ya que además de garantizar el pago de la matrícula, asume los costos de sostenimiento de los estudiantes cuando éstos se desplazan a otros territorios a estudiar. En estas circunstancias, un 85% de los estudiantes ha optado por ingresar a universidades privadas, lo que tiende a elevar de manera considerable los costos y terminará por dejar a las universidades públicas sin algunos de sus mejores estudiantes. Los estudiantes terminan eligiendo principalmente las privadas porque su mayor costo genera la ilusión de un mayor beneficio. Además, esas universidades no sufren por paros y cuentan con mejores instalaciones y nexos internacionales. No estamos, por lo tanto, ante una libre elección y, sin duda, las privadas acreditadas y de élite han sido las grandes beneficiadas, ya que en poco tiempo han alcanzado 30.500 nuevos matriculados y recibirán 10.000 adicionales, si el MEN no cambia los criterios y condiciones del programa.
El programa SPP ha generado una amplia discusión en la comunidad universitaria. Diversos profesores e investigadores se han pronunciado al respecto; entre ellos, el profesor Julián de Zubiría, director del Instituto Merani, quien ha realizado investigaciones más profundas sobre el programa, las cuales le permitieron, en su momento, denunciar que para el primer y segundo año de vigencia, el 98% de los recursos de SPP fueron destinados a universidades privadas. Recientemente, el Consejo Académico de la Universidad del Valle se pronunció, argumentando que no es cierto que SPP disminuirá la inequidad y que tampoco tendrá un impacto significativo sobre la ampliación de la cobertura. Por otro lado, los representantes de los docentes ante los consejos superiores y académicos del país también han expresado fuertes críticas al programa. Dicen al respecto: “Se reitera el rechazo absoluto a los nefastos impactos que la política gubernamental de financiamiento a la demanda –a través del Programa “Ser pilo paga”– viene produciendo en la educación superior del país, pues destina recursos públicos al apalancamiento presupuestal de las Universidades privadas en detrimento del subsidio a la oferta que debe ser la directriz en un Estado Social de Derecho. Este Programa profundiza brechas sociales con la anuencia de un Estado incapaz de garantizar educación de calidad y sin costo para todos los colombianos”
Los estudiantes también nos hemos hecho participes de este debate, pues somos un grupo de interés mayoritario que estamos luchando por la defensa de la Universidad Pública. Organizamos gigantescas marchas en los años 2011 y 2013 bajo la consigna: “La educación es un derecho y no una mercancía”. En ese contexto, el representante de los estudiantes ante el consejo superior de la Universidad Tecnológica de Pereira (UTP), tras proponer constantemente el debate sobre los recursos ejecutados por el programa Ser Pilo Paga y con el acompañamiento de otros consejeros, logró que este órgano colegiado avale su denuncia y fruto de ello envíe una carta dirigida a la Ministra de Educación Yaneth Giha donde se puede evidenciar que el programa –contrariamente a lo argumentado por sus defensores– se financia con los recursos de las universidades públicas, quedándose la mayoría de ellos en las universidades privadas acreditadas y de alta calidad que participan del programa.
Lo que hemos encontrado es que efectivamente los investigadores, profesores y académicos, tenían la razón al señalar los riesgos de un programa que prioriza la financiación de la demanda, disminuyendo grandes cuantías presupuestales destinadas a la financiación de proyectos de inversión de las IES públicas vía recursos CREE y los cuales fueron trasladados al programa como lo devela la carta del Consejo Superior. De esta manera, podemos concluir que se está desfinanciando las universidades públicas, como puede evidenciarse de manera clara en el siguiente cuadro:
Por lo anterior, los estudiantes solicitamos al Ministerio de Educación Nacional que no siga desviando los recursos de las IES públicas para financiar las universidades privadas mediante SPP, que este programa apoye a estudiantes exclusivamente para las universidades públicas generando un amplio sistema nacional de becas para jóvenes con Sisbén nivel 1, 2 y 3 y que se consolide la gratuidad y el acceso universal a la educación superior pública. La educación es un derecho y éste debe ser garantizado por el Estado.Como se puede evidenciar en la tabla, los recursos destinados para el programa Ser Pilo Paga por cuenta de los fondos CREE para el 2016 ascienden a $ 373.290.470.719 y se proyecta que para la vigencia 2017 dejemos de recibir el 67% de dichos recursos, es decir, $ 434.871.494.172.