Frente a la legalización de la marihuana y otras drogas los candidatos que buscan la presidencia de Colombia coinciden en la legalización del cannabis. Gustavo Petro, quien confesó haberla probado en algún momento de su vida, pero que no le gustó, apoya la legalización, la regulación y fue más allá en decir que también está de acuerdo con la exportación. Por su parte el ingeniero Rodolfo Hernández, quien también apoya la legalización ha dicho que lo más peligroso en cuanto a las drogas es la prohibición. Una de las protestas del santandereano es industrializar la producción de otras drogas como la amapola y la cocaína.
Las condiciones del campo colombiano permiten que el país produzca drogas de gran calidad y los políticos no se han escapado de probarlas. Algunos se han confesado y otros, como el excontralor Carlos Ossa Escobar, que se ha convertido en el político más famoso que han fumado cannabis, al ser detenido en 1.993 en el aeropuerto de Bogotá por tener en su posesión una bolsa de marihuana que pensaba llevar a Caracas para su consumo personal.
El expresidente Juan Manual Santos también confesó que en su época de universitario en Kansas, Estados Unidos fumó marihuana. El expresidente Ernesto Samper, que está de acuerdo con la legalización de la planta para consumo recreacional, ha dicho que una sola vez la probó, pero no más.
Enrique Peñalosa, exalcalde de Bogotá, dijo que también probó cannabis en su época de estudiante. Otro exalcalde capitalino que la probó es Gustavo Petro.
Sergio Fajardo, excandidato presidencial, dijo que la probó cuando su movimiento era un fenómeno en Medellín y que lo hizo solamente para experimentar que se sentía.
Pacho Santos mencionó en un diario holandés hace unos años que fumó marihuana y entre su circulo privado se menciona que era un consumidor frecuente de la planta.
México legaliza la marihuana y abre la puerta a un negocio multimillonario