Con el exmagistrado Luis Ernesto Vargas en la Embajada de Colombia ante la OEA en Washington, Gustavo Gallón en la sede de la ONU en Ginebra, Suiza y ahora con el jurista Carlos Rodríguez en la delegación diplomática en San José de Costa Rica, sede de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el presidente Gustavo Petro deja blindada internacionalmente en ese tema, muy sensible para su gobierno.
Fue esta Corte Internacional la que condenó al Estado colombiano como responsable del magnicidio de 1.500 dirigentes de la Unión Patriótica, un caso que llevó durante muchos años la senadora del Pacto Histórico, Jael Quiroga, quien además perdió a su esposo en esta cruenta persuasión política. En su momento, en septiembre del 2016, el presidente Juan Manuel Santos reconoció esta atrocidad por parte del Estado colombiano.
Carlos Rodríguez es un abogado javeriano experto en derechos humanos y conocedor de la normatividad internacional. Además formó parte del equipo internacional que llevó la demanda de la destitución de Gustavo Petro como alcalde Bogotá por parte del Procurador Alejandro Ordóñez ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que a la final no solo les dio la razón sino que sentó jurisprudencia: la Procuraduría quedó inhabilitada para suspender funcionarios de elección popular. Un fallo que la Procuradora Margarita Cabello intentó reversar por la vía legislativa y que está en revisión en la Corte.
Rodríguez reemplazará a Angelino Garzón, exvicepresidente en el primer gobierno de Juan Manuel Santos y quien renunció al cargo hace varios meses.