Un día después de que la Fiscalía anunciará cargos contra Laura Sarabia y Armando Benedetti por la presunta financiación irregular en la campaña presidencial, el embajador ante la FAO anunció que empacó maletas de regreso a Colombia, sin embargo, continuará trabajando con el presidente Petro, esta vez, como asesor del gobierno en temas nacionales.
Antes se realizará un tratamiento contra el alcohol y el consumo de drogas en un nuevo intento por cambiar su estilo de vida y recuperar su matrimonio con Adelina Guerrero quien lo denunció por violencia intrafamiliar después de que, con cuchillo en mano, la amenazó con cortarle la ropa mientras se encontraban en Madrid. El exsenador se libró de ser capturado ese día por su inmunidad diplomática, pero eso no evitó que se le abrieran procesos en Colombia en la Fiscalía y Cancillería. Dos meses después de lo sucedido, la pareja se volvió a reunir en una visita express de Benedetti a Barranquilla por el cumpleaños de su hija menor.
Benedetti, quien se posesionó en febrero de este año como Embajador en la FAO, no solo intentará recuperar a su familia, también deberá responder por su participación en el escándalo de contratación del Fondo de Financiación del Desarrollo (Fonade). Mientras era posesionado ante la FAO, la Corte Suprema le abría al tiempo una nueva investigación por los delitos de concierto para delinquir, cohecho propio y enriquecimiento ilícito de servidor público. Por este caso, fueron capturados los sahagunenses Bernardo ‘el ñoño’ Elías y Musa Besaile Fayad y enviados a la cárcel como resultado de la condena que les había impuesto la Corte Suprema de Justicia en febrero de 2024. Sin embargo, Besaile salió de la cárcel este 23 de noviembre.
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Fue durante la campaña de Petro cuando Benedetti entabló una cercanía con el presidente al igual que con Laura Sarabia quien había sido su mano derecha en su UTL en el Senado. Precisamente las declaraciones del embajador ante la FAO de haber conseguido $15 mil millones para financiar la gira en la Costa lo que prendió las alarmas sobre los topes de la campaña de Petro que lo tienen en la lupa del Consejo Nacional Electoral. A pesar de la revelación, Petro complació a Benedetti con la embajador ante la FAO y ahora tampoco lo suelta tras su renuncia dándole un nuevo salvavidas: ser su asesor de confianza.
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