Cuando Gustavo Petro militaba en el M-19 esta guerrilla estaba dividida en dos líneas, una militar y rural en cabeza del comandada por Carlos Pizarro y la otra el ala urbana en la que militaban tanto Otty Patiño, Vera Grabe y Gustavo Petro quien entró a la guerrilla a los 17 años como estudiante de Zipaquirá.
Otty Patiño, nacido en Buga en el Valle del Cauca, estuvo cerca a Jaime Bateman y fue uno de los estrategas de la toma de la Embajada de la República Dominicana, uno de los golpes más desafiantes que dio el M-19 contra el gobierno de Julio Cesar Turbay Ayala y su Estatuto de Seguridad. Fueron tomados cautivos 15 diplomáticos y su liberación tras una negociación en la que participó el gobierno cubano, el M-19 difundió ampliamente su proyecto político.
Desde entonces Patiño se convirtió en pieza clave para las negociaciones de paz que estableció ésta guerrilla con los gobiernos de Belisario Betancur y Virgilio Barco, entre los años 1982 y 1990. En 1984 fue uno de los firmantes de los acuerdos de Corinto, Cauca sin que se alcanzara a consolidar la paz en el gobierno Betancur. En 1990 participó de la mesa de negociación con el gobierno Barco que terminó con la firma de la paz que dio origen a la Constitución de 1991, de la que Otty Patiño fue elegido constituyente.
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Petro no ha ocultado la admiración que siente por Patiño e incluso le dedica varias páginas de la larga entrevista que le hace Hollman Morris y que se convirtió en un libro publicado en el 2022 y que se tituló Una vida, muchas vidas, una suerte de autobiografía del actual presidente. Lo nombró jefe negociador con el ELN como muestra de su confianza en esta compleja negociación. Confianza y experiencia que parecen ser la combinación que buscó el Presidente para nombrarlo en reemplazo de Danilo Rueda como lo anunció en su cuenta X.
Los procesos hacia la paz del país serán dirigidos por Otty Patiño, agradezco a Danilo todo su inmenso esfuerzo.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) November 22, 2023