No hay un opositor al gobierno de Gustavo Petro más férreo e implacable que el ex candidato presidencial Jorge Enrique Robledo. Lo conoce demasiado bien. Compartió con Petro militancia política en el Polo Democrático y lo vio moverse internamente para ganar espacios para él mismo a costa de los contendores, en contravía de los lineamientos del Partido, pensando solo en él y en su ambición por encima de cualquier interés colectivo. Y así gobierna.
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Robledo no le quita la lupa de encima. Ha seguido de cerca su metamorfosis ideológica y la manera como ha tranzado para lograr sus propósitos y esta fue quizás una de las motivaciones para escribir sus memorias política Robledo, Sin pelos en la lengua.
Porque si de algo se jacta el exsenador Jorge Enrique Robledo, fundador del Partido Dignidad & Compromiso es de no dar bandazos y mantener una línea coherente con sus convicciones y con su vida, sin apegarse a los triunfos ni a las derrotas, como relata al detalle en este libro que acaba de publicar Aguilar, una de las editoariales de Penguin Random House.
Reconstruye y reflexiona sobre satisfacciones personales como haber sido diez veces elegido como el mejor senador de Colombia, su rol en coyunturas específicas del país, cuarenta años de lucha desde la izquierda, desde la oposición, desde la crítica a las políticas neoliberales, que le dan la autoridad para auscultar el gobierno Petro, cuestionando su verdadera filiación en la izquierda y sus decisiones que lo equiparan, según Robledo, con cualquier político tradicional. Robledo le responde a Adolfo Beck y Juan Manuel Ospina, como lo ha hecho siempre, Sin pelos en la lengua.