Oficialmente ya se colocó la primera piedra de lo que se espera sea uno de los hospitales más grandes y con mayor capacidad de atención del Eje Cafetero. La idea surgió en 2016 cuando lideres de distintos sectores de Pereira y sus alrededores organizaron la Fundación Tatamá para mejorar los servicios de salud en relación. Buscaron el respaldó de la Fundación Santa Fe de Bogotá y la Fundación Santo Domingo con el propósito de construir un centro hospitalario de primer nivel que cubra los departamentos de Risaralda, Quindío, Caldas, Norte del Valle y Chocó. Hasta ahora el único del suroccidente era el de la Fundación Valle del Lili que compite con los mejores hospitales del mundo.
El esfuerzo dio fruto, ya tienen edificio y la base financiera
En total, se este hospital tendrá una inversión de $232 mil millones, $24 mil millones de los cuales fueron recaudadas por la Fundación Tatamá y por 430 donantes de la región, mientras que el resto correrá por cuenta de la Fundación Santa Fe y de la Fundación Santo Domingo, la iniciativa filantrópica de los Santo Domingo que nació hace más de 60 años con el nombre de Fundación Barranquilla y liderada por Julio Mario Santo Domingo, quien le pasó la batuta a su hijo Alejandro, hoy a la cabeza.
Entre otras cosas, esta fundación estuvo involucrada en la creación de la Universidad del Norte, a la que ha ayudado a crecer y ahora también le pondrá plata a un hospital con el que esperan beneficiarse más de 3 millones de personas.
Por su parte, la Fundación Santa Fe, con cinco décadas de historia, es uno de los hospitales más reconocidos de la capital y del país, tanto así que el más reciente ranking de Latam Business Conference (LBC) lo posicionó como el segundo mejor de la región solo por detrás de uno de Sao Paulo. Con 94.4 puntos sobre 100, superó a la Fundación Cardioinfantil, también de Bogotá, que ocupó la quinta posición y al Hospital Internacional FCV de Santander, que se coló en la sexta.
El objetivo entonces es que este nuevo proyecto en Pereira tenga los mismos estándares de calidad para ser un referente en Colombia y en el continente. Además, promete ser un edificio que esté a la vanguardia de la arquitectura nacional y prueba de ello son el Premio Latinoamericano de Arquitectura Hospitalaria que recibió el año pasado su diseño y el de Mejor Proyecto Futuro en la categoría hospitalaria en el World Architecture Festival de Singapur.
Se estima que para 2026 ya se estén atendiendo pacientes para servicios ambulatorios y que ya en 2028 entren en operación todos los demás servicios.
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