El primero concretó realizaciones de todo tipo para beneficio de los estratos 1, 2 y 3[1] pero, hay tres mejoras de infraestructura ampliamente destacables y que lo harán recordar por siempre:
- La recuperación del “Bronx” o la “Olla del Cartucho”, a pocas cuadras de la Plaza de Bolívar, 15 manzanas de horror, criminalidad y degradación humana, reemplazadas por el Parque del Tercer Milenio.
- Transmilenio y TransMicable (también dejó lista la financiación de la 1ª línea del Metro) y
- Diseño y financiación de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales “Canoas”[2].
En la alcaldía de Petro recordamos, por el contrario, el desastre de su terca e improvisada “estrategia” de cambio del sistema de recolección de basuras y sus logros basados en subsidios y asistencialismo para la reducción de la pobreza, pero en las mejoras en educación, vivienda, servicios públicos y salud, lejos, pero bien lejos de los logros de Peñalosa. Sin embargo, como no repitió alcaldía, sumémosle lo que está sucediendo con su 2ª oportunidad, ahora en los 28 meses como Presidente, su última oportunidad para demostrar su liderazgo y capacidad de gestión, pero ¿Qué es lo que encontramos?
Ha profundizado la polarización con afirmaciones repetidas “sideralmente”, cual Goebbels del S. XXI[3], casi todas mentirosas y fantasiosas, “adobadas” con ataques a sus contradictores, complicidad con los tiranos del mundo y entre nosotros, con criminales y terroristas; todo por su afán de ser reconocido como líder del mundo, al menos en su “lucha” contra las energías obtenidas del petróleo, que tanto han tenido que ver con el agravamiento del cambio climático; válido sin duda esto último, pero, carente de realismo en lo que a Colombia se refiere: $ 32,1 billones de ingresos fiscales[4], que, gracias a su obstinación, se reducirán en $ 12 billones en 2024 y otro tanto en 2025 (La República, Nov/2022), justamente el faltante de su fallida “Ley de Financiamiento”.
El impacto de su errática gestión, ha provocado una desaceleración frustrante, fruto del miedo y la incertidumbre: 4,3% de crecimiento promedio en los gobiernos de Uribe; 3,8% en los de Santos; 3,4% en el de Duque a pesar de la Pandemia; ahora vamos en caída, del 7,3% en 2022 (Petro se posesiona en agosto) al 0,6% en 2023 y este año, si bien nos va, creceremos un magro 1,8% y alrededor del 2,6% en 2025 (Banrepública, EME).
Tenemos además una caída sin precedentes en la inversión, el -25,9% en el último año, con un desplome también en la principal fuente de financiamiento, el ahorro nacional, que se redujo en un -10,7%. En el gobierno Duque se creció 14% en promedio anual, con excepción del 2020 cuando cayó -15,5% por la crisis pandémica (Dane)[5].
El contraste es muy oscuro y negativo, especialmente para el colombiano de a pie: hay más “cortinas de humo” que realidades. Un poco de REALISMO, basado en la búsqueda de consensos, nos alejarían del abismo al que nos está llevando este populismo de izquierda que lo único que logra son algunas “migajas” que caen de la mesa de la politiquería, la criminalidad y el terrorismo, “adobados” por la corrupción desbordada, cuando la primera exigencia sería construir una “mesa sólida” con asientos para todos en vez del autismo ideológico que nos han impuesto.
///
[1] 123.234 viviendas (63.877 VIS), 54 colegios nuevos y mejoras en 410 existentes, Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo, mejorado con la instalación de 1.612 videocámaras, Grandes Bibliotecas: El Tunal, El Tintal, Suba y Simón Bolívar (más 5 bibliotecas menores, 11 barriales y 5 que aportó Colsubsidio).
[2] Solo hasta septiembre de 2024, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca levantó las medidas cautelares que habían detenido el proyecto; se reiniciaron las obras y en 2026 se terminará, para la recuperación del 70% de las aguas residuales de Bogotá y el 100% de las de Soacha.
[3] Joaquín Mateu-Mollá. (2020, enero 31). Los 11 principios de la propaganda de Goebbels. https://psicologiaymente.com/social/principios-propaganda-goebbels (Principios de simplificación, contagio, transposición, exageración y desfiguración, vulgarización, orquestación, renovación, verosimilitud, silenciación, transfusión y unanimidad).
[4] En 2023, el 2,2% del PIB, cuando en 2022 el sector aportó $ 18,2 billones en impuestos, el 1,3% del PIB.
[5] Cuentas nacionales 2005 – 2023 (pr).