El líder de la iglesia Berea, Gabriel Ferrer, era docente titular de tiempo completo de literatura en la Universidad del Atlántico y renunció desde el mes de diciembre para esperar la segunda llegada de Jesucristo.
La carta de renuncia, dirigida al rector José Rodolfo Henao, profesa “Renuncio a la Universidad del Atlántico porque quiero proseguir al blanco, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús (...) Renuncio a la Universidad del Atlántico por una orden directa que me dio el Señor Todopoderoso” para después añadir: “Dejo atrás la universidad y el conocimiento humano porque he probado lo excelso que es el conocimiento y el amor de Dios que es en Cristo Jesús”
El religioso, que cuenta con una hoja de vida impecable como investigador en literatura y lingüística, anunció el pasado domingo 24 de octubre, durante el culto que transmitió por su canal de Youtube, que ese sería su "último servicio en la tierra".
El grupo que lidera se encuentra en ayuno desde el mes de diciembre, confinados en una casa en el barrio Virgen del Carmen esperando que “el Señor los rapte”.
“Al principio no entendíamos bien qué estaba pasando. Fue mi cuñada quien comenzó a asistir a la iglesia y desde allí todo cambió. Comenzó a vender y a regalar sus cosas, a cambiar con mi hermano y de repente decidió irse de la casa y llevarse al niño de ellos quien tiene 4 años”, dijo un familiar de una de las religiosas que se encuentra en el ayuno, al medio El Heraldo.
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