“Como si de una enfermedad contagiosa se tratara, cuando metemos en un frutero una manzana que empieza a podrirse, comienzan a hacerlo las demás frutas que están más cerca de ella... La culpa es del gas etileno que desprende la manzana mala. El etileno es una hormona vegetal que liberan los frutos durante su proceso de maduración... La manzana sufre un aumento muy brusco de emisión de etileno cuando madura. Por eso, cuando hay una manzana demasiado madura o en proceso de putrefacción en el frutero hay que sacarla para evitar que el gas alcance a las otras…” (Artículo: “¿Por qué una manzana podrida echa a perder el resto del frutero?” de rtve.es).
Como un eufemismo para disimular el impacto negativo de una determinada decisión adoptada por una Institución, para luego poder salvar sus responsabilidades, hoy se utilizan como “manzanas podridas” a las persona que hacen esa especie de “trabajo sucio”, a las cuales luego señalan de ser una mala influencia, negativos, críticos o de malos comportamientos.
En Colombia ese lenguaje eufemístico viene haciendo carrera hace rato. Han dicho que son “manzanas podridas” los que causaron 6402 asesinatos de personas inocentes, que denominaron cruelmente “falsos positivos”.
También fueron “manzanas podridas” quienes asesinaron a varias decenas de manifestantes en los paros del 21 de noviembre de 2019 y el 28 de abril de 2021, para recordar solo hechos recientes. También serían “manzanas podridas” quienes están detrás de los asesinatos de miles de líderes sociales.
Esas “manzanas podridas” son la forma de camuflar una política sistémica, organizada, detrás de la cual hay verdaderos grupos organizados. Un nuevo escándalo se cierne sobre la Policía nacional de Colombia, cuando las redes sociales dieron a conocer un evento oficial de “intercambio cultural” que se llevó a cabo el pasado jueves, 18 de noviembre, en la Escuela de Policía Simón Bolívar del municipio de Tuluá, Valle del Cauca, haciéndole un homenaje a la Alemania Nazi por parte de policías que usaron uniformes con esta simbología; incluso en una foto aparece un hombre personificando a Adolf Hitler.
Las embajadas de Alemania e Israel rechazaron cualquier muestra de apología al nazismo. “Eventos como este son indignantes y ofenden de manera directa no solo a los judíos, sino también a todas las víctimas del régimen nazi y sus criminales”, dijeron en un comunicado público.
Este escándalo es rechazado también por la prensa internacional como DW, The Washington Post, BBC, el portal suizo Blick.ch, FranceInfo, France 24, El País de España, etc., pero además por las embajadas de otros países.
El director de la Policía de Colombia, general Jorge Luis Vargas, anunció que el coronel Jorge Ferney Bayona Sánchez, quien dirigía la escuela, fue llamado a calificar servicios.
También citaron a debate en el Senado al ministro de Defensa, Diego Molano (el ministro peor calificado en toda la historia de los 13 años del Panel de Cifras y Conceptos), quien simplemente dice que no es una política institucional. ¿Entonces serán también “manzanas podridas”? ¿O es esta la doctrina de algún sector comprometido en la utilización de métodos proscriptos y la violencia para reprimir a los colombianos que tienen contradicciones con el Gobierno?
El país exige la toma de más decisiones fulminantes en un tema que lo tiene en entredicho mundial. ¡Que se conozca toda la verdad!