Hace pocos días se conoció una propuesta de estatutos del partido de las Farc, cuyo lanzamiento será el próximo primero de septiembre, sin cambiar de sigla, pues se denominará: “Fuerza Alternativa por la Reconciliación de la Nueva Colombia-Esperanza del Pueblo Farc-Ep”. Además como un exabrupto monumental en el capítulo cuarto, en donde se plantea la orientación ideológica y política, se hace un verdadero batiburrillo entre el marxismo-leninismo, el pensamiento emancipador bolivariano y el pensamiento crítico libertario, lo cual constituye una confusión filosófica y política imposible de entender.
Indudablemente que si el partido de las Farc pretende así sea demagógicamente o por conveniencia denominarse bolivariano, debe saber primero que los legados de Bolívar se identifican totalmente con la doctrina de Juan Jacobo Rousseau, por lo que debería renegar del marxismo-leninismo el naciente partido fariano; tampoco se puede pasar por alto que el señor Karl Marx en una biografía publicada en 1858 trató al libertador de canalla, cobarde y traidor y lo acusó de haber entregado a Francisco Miranda a los españoles en 1812. Eso demuestra que el marxismo está en las antípodas del bolivarianismo, y el sincretismo entre Bolívar y Marx sería como si en los primeros años del cristianismo este se hubiera fusionado con la hipocresía de los fariseos, a lo que se agrega, que jamás los comunistas totalitarios han podido explicar los señalamientos de Marx en contra de Bolívar.
También es increíble que un partido comunista totalitario o marxista-leninista sea libertario, porque como ya lo hemos explicado en otras oportunidades, en la primera internacional de los trabajadores en siglo XlX el señor Marx en persona, recibió el repudio generalizado de los trabajadores por sus tesis estatistas, burocráticas y embrutecedores, pues quería utilizar al Estado para llevar a los obreros a la esclavitud política perpetua, como muy bien lo señalo el padre de los libertarios Mijaíl Bakunin en su libro La Libertad. Entonces juntar al marxismo con el pensamiento libertario es como revolver el agua y el aceite
El artículo once de la propuesta de estatutos del partido de las Farc sobre estructura interna y órganos de dirección, produce hilaridad cuando mencionan a las comunas, ya que estás en sana lógica se entienden desde el punto de vista libertario como un rompimiento con el Estado, las fronteras y todas las formas de burocracia y sometimiento, como lo plantearon los libertarios para quienes la comuna de París en 1871 era anarquista por ser un proyecto popular autogestionario, pero las Farc quieren utilizar las fementidas comunas para satisfacer los apetitos burocráticos y políticos de su cabecillas, lo que es diametralmente opuesto a los ideales libertarios o de comunas bien entendidos.
Las Farc en su propuesta de estatutos, siguen con sus dicotomías y reduccionismos copiando a Maquiavelo, quien fue incluido en el ideario marxista-leninista por el comunista italiano Antonio Gramsci, por ello continúan con el esquema entre capitalismo o socialismo y entre izquierda o derecha, como si esos términos no tuvieran una variada gama de interpretaciones y acepciones; subrayando que el marxismo-leninismo de las Farc es contrario a la democracia y a la libertad, porque sus métodos burocráticos tiene como principios a la violencia y a la mentira, ya que la militancia del comunismo totalitario pretende alcanzar el poder político para eternizarse en el manejo del Estado en contra de lo que decía un libertario como Pierre-Joseph Proudhom quien afirmaba: “El problema no está en saber cómo seremos gobernados sino cómo seremos más libres”.
En el lanzamiento del partido de las Farc, el primero de septiembre en la plaza de Bolívar de Bogotá, tendremos que ver por un lado a los guerrilleros desmovilizados, pero también a campesinos arriados como ganado provenientes de las zonas de influencia guerrillera, para lo cual fletaran una buena cantidad de buses al mejor estilo de los gamonales politiqueros; por eso no podemos olvidar que el marxismo-leninismo es una logia supersticiosa y criminal, cuyos integrantes se creen predestinados no se sabe por cual deidad, para someter a los pueblos a sus instintos ruines de acuerdo a los fetiches del materialismo histórico y la inevitabilidad.
Alguien comentaba jocosamente que los comunistas totalitarios son tan enfermizos por tener poder político, que en el noveno circulo del infierno de acuerdo a la Divina Comedia de Dante, se encuentran Fidel Castro y Hugo Chávez besándole las pezuñas a Lucifer para que los deje gobernar en alguna parte del averno, porque ni en el mas allá pueden estar sin burocracia, no importándoles los crueles tormentos que sufren en ese tétrico lugar. Ya que es evidente que el esperpento marxista-leninista línea ideológica de las Farc, es absolutamente burocrático y no tiene nada que ver con el bolivarianismo ni con el pensamiento libertario, y los revoltijos que pretende hacer el partido fariano demuestran solamente oportunismo y doblez.