La inseguridad en el municipio de Malambo se ha convertido en una constante en los últimos años y con un aumento considerable en los últimos días, atracos a cualquier hora del día o la noche, hurto de motos y motocarros, atentados criminales y el flagelo de la extorsión a los comerciantes son algunos de los actos más comunes en el municipio.
Investigando un poco encontramos por ejemplo que en la administración del alcalde Efraín Bello se hicieron algunas acciones como entrega de motocicletas a la policía y dotación de 15 radios y 50 alarmas a los frentes de seguridad que estaban organizados en su momento, también se realizó instalación de algunas cámaras de seguridad en algunos puntos del municipio y una en Caracolí, en lo que él denomino un programa piloto, sin embargo al parecer nada de eso ha funcionado, mientras surge la pregunta si esas cámaras algún día sirvieron correctamente y si fueron entregadas la actual administración en pleno funcionamiento.
Pasando a la administración actual del alcalde Rumenigge Monsalve, se entregó a la policía dos vehículos tipo panel que serían para el casco urbano y la otra apoyaría la seguridad en Caracolí, durante este periodo administrativo la inseguridad se ha mantenido en el municipio; para recordar algunos casos, el asesinato de dos policías (uno en el Concord y otro en el barrio Juan XXIII) que no estaban de servicio al momento de ser asesinados pero sí eran patrulleros activos de la institución.
Ya han pasado tres secretarios de gobierno sin pena ni gloria con relación a garantizar la seguridad de los malamberos.
Sergio Ramírez como secretario de gobierno solicitó el aumento del pie de fuerza argumentando que, en la actualidad, el municipio contaba con 144 uniformados, cifra que resulta ínfima para atender a una población de más de 190.000 habitantes. No se conoce información sobre si su petición fue tenida en cuenta; de cualquier modo, su paso por esa secretaría no mejoró los resultados.
Muchos consejos de seguridad se han realizado desde la época de la señora Edilsa Cortina como secretaria de gobierno; ella obtuvo muy buena aceptación de la comunidad por su carisma, pero poca efectividad en la reducción del delito, una vez se le indagó por qué no funcionaban las cámaras de seguridad, y su respuesta fue que era cuestión de mantenimiento, pero nunca se dio solución.
En el tiempo transcurrido Javier Torres como secretario de gobierno el panorama continúa siendo el mismo, consejos de seguridad con las diferentes fuerzas que están asentadas en el municipio como Policía de Carabineros, altos mandos del batallón Vergara y Velazco, mandos de la Fuerza Aérea CACOM 3 y diferentes mandos de la Policía Metropolitana de Barranquilla.
Se toman posibles acciones que en su mayoría se quedan en las mesas de trabajo mientras en las calles no se ve el acompañamiento constante del ejército, carabineros, fuerza aérea entonces no se entiende su participación en los consejos de seguridad cuando al final la seguridad del municipio recae nuevamente en manos de la policía y que por más esfuerzos que se hagan la delincuencia les sigue ganado la batalla.
No queda más que decirle a la comunidad que la seguridad de Malambo y el área metropolitana de Barranquilla es compromiso de todos por eso tienen que denunciar para que la justicia pueda actuar, es lamentable cuando capturan a una persona con 10 o 15 anotaciones y a par de días nuevamente está delinquiendo por que la justicia considera que no son un peligro para la sociedad, cuando para hurtar un celular le quitan la vida a cualquier ser humano.
Por último, decirle a las autoridades civiles y judiciales del municipio que se tienen que pasar del dicho al hecho y ser contundentes contra el delito, si el nuevo sistema de cámaras que se anunció ayudara perfecto, pero mientras eso pasa hay que seguir trabajando por devolverle la paz y la tranquilidad a los habitantes de Malambo.