Con la de ayer fue la cuarta reunión de los alcaldes del llamado Pacto de Ciénaga, pero esta vez se llevó a cabo en Aracataca, en donde además de los burgomaestres participaron los diputados de la mayoría de la asamblea, los mismos que en el actual periodo de la duma no han presentado sino un solo proyecto para exigirle al gobernador que no utilice más el color anaranjado en sus transmisiones en vivo por las redes sociales con grandes audiencias, e igual los que hundieron los proyectos de gran envergadura que el mandatario de los magdalenenses ha presentado a esa corporación a fin de mejorar las condiciones de vida de los habitantes de la región en materia de acueducto, alcantarillado, salud y en contra de la pobreza.
Los alcaldes iniciaron sus administraciones junto con el gobernador Caicedo. Es decir, el primero de enero de 2020, pero en ese tiempo todavía no se les ha visto la inauguración de una obra en sus municipios, sin embargo, sí se les ha visto de forma reiterativa en las reuniones del macabro pacto con los diputados opositores del mandatario departamental y los parlamentarios de la circunscripción, también unidos por primera vez en la historia, pero para no permitirle al que los derrotó políticamente en las últimas elecciones que cumpla con su plan de gobierno.
Según los alcaldes del Pacto, el presidente Duque les va a dar un billón de pesos para vías terciarias, educación, salud e infraestructura, gestión del riesgo, saneamiento básico, proyectos productivos y energía para todos los municipios que gobiernan desde hace ya dos años en el medio año que le queda de presidente.
No obstante, todo el mundo sabe que se trata más de una estrategia política que de gestión para sus municipios, pues para nadie es un secreto que ad portas de las elecciones parlamentarias y presidencial, se necesita que los actuales congresistas aliados a Duque y a esos alcaldes tengan cómo financiarse para seguir en la brega antipueblo desde el Congreso.
"El Pacto Funcional por el Magdalena es una realidad", dijo el diputado del Centro Democrático Jair Mejía en un pronunciamiento que hizo por medio de su cuenta de Facebook. Pero no explicó de cuál realidad, si del presente o del futuro o simplemente del realismo mágico que nuestro premio nobel de literatura, nacido en esa misma tierra donde, paradójicamente, se reunieron ayer por cuarta vez en dos años, se refirió muchas veces en sus magistrales obras literarias.
Ojalá y no les pase como al coronel Aureliano Buendía cuando estén frente al pelotón de fusilamiento llamado Pueblo y recuerden esas veces en que los llevaron a conocer el hielo de la política rastrera que todavía algunos insisten en practicar pese a que ya nadie les cree.
