En diciembre del año 1993 comienza uno de los capítulos más difíciles de la historia financiera de Popayán, la administración municipal de su momento suscribe un contrato de obra pública con la firma de ingenieros en cabeza de Luis Héctor y Carlos Alberto Solarte.
Un modelo de contratación cuya sostenibilidad financiera dependía de la concesión de un peaje urbano, que se construiría en inmediaciones del hoy Parque Industrial, al norte de la ciudad. Un contrato que se firmó y ejecutó, sin contemplar lo más importante, el consentimiento de las comunidades involucradas, quienes al final se opusieron e impidieron el cumplimiento de las obligaciones contractuales del Municipio.
De ahí en adelante una serie sucesiva de decisiones por parte de nueve Administraciones lamentablemente convirtieron $4.800 millones de una deuda del año 1993 en $72.600 millones en el año 2019, confirmados en la sentencia de un Laudo Arbitral contra el Municipio por daño emergente y lucro cesante, los cuales a su vez crecieron exponencialmente hasta llegar a los $120.000 millones en enero de 2024, cuando Juan Carlos Muñoz Bravo recibió la administración municipal. Apelar judicialmente la decisión que confirmó el Tribunal Administrativo del Cauca y continuar aplazando el pago, que cada día suma $40 millones, le hubiese dejado a nuestra ciudad para el 2027 una liquidación de esta deuda en cerca de $200 mil millones. Para esta Administración no fue una opción continuar con la política de nuestros antecesores, quienes no redireccionaron rentas ni alimentaron con suficientes recursos el fondo de contingencias judiciales, ni tampoco llegar a un acuerdo de pago con los dos acreedores.
La Alianza con Popayán también buscará el saneamiento fiscal y financiero del municipio y hoy podemos informar a nuestros ciudadanos que les estamos cumpliendo, en pocos meses de gobierno, la perseverancia y transparencia en las negociaciones con los apoderados de los Hermanos Solarte ha dado resultados. Nuestro Alcalde ha logrado lo que parecía imposible, en corto tiempo logró un proyecto de acuerdo conciliatorio, que en 3 años y medio permitiría saldar una deuda de más de 30 años. Y con ello, descarta la opción de acogernos a la Ley 550 o de Reestructuración de Pasivos. En un acto de grandeza se ofrecen excusas a unos contratistas a quienes no se les cumplió, algo clave para recuperar la confianza en la negociación con el Municipio y que, de paso, le ahorrará a Popayán cerca de $80mil millones. Si a bien lo considera el Tribunal Administrativo del Cauca y la Procuraduría, quienes tienen la última palabra.
Se necesitó de un esfuerzo articulado de diferentes dependencias de la Administración Municipal, pero sobre todo de voluntad. Damos gracias a Dios, porque tenemos como Alcalde a un hombre de principios, que antepone los intereses del Municipio sobre cualquier beneficio particular. Gracias al respaldo de la Oficina Asesora Jurídica que logró la mejor defensa judicial del municipio. Gracias al equipo de Financiera, Tesorería y Contabilidad de Secretaría de Hacienda por su rigurosidad en la identificación y estimación de los rubros presupuestales que respaldarán este acuerdo de pagos.
Se propone pagar 6 cuotas que sumarán alrededor de $110.000 millones de pesos, que al destinarse al fondo de contingencias judiciales exige un gran sacrificio de recursos de inversión. Más aún para un Municipio que para este año cuenta con solo $150.000 millones de rentas propias para libre destinación y con grandes necesidades para atender población vulnerable y víctima de la violencia que día a día llega a nuestra ciudad, levantar una economía que en su mayoría es informal, inestable y golpeada constantemente por bloqueos de la vía panamericana, expandir la cobertura de agua potable y saneamiento básico en la periferia urbana y zona rural, así como solucionar problemas de movilidad con una infraestructura deficiente.
Así, convocamos a los propietarios de bienes inmuebles, a los grandes y pequeños empresarios de diferentes sectores económicos, a los arrendatarios o usuarios de los espacios públicos (deportivos, plazas de mercado, entre otros), a los infractores morosos y en general a todos nuestros contribuyentes para que estén al día en el cumplimiento de sus obligaciones tributarias. Aprovechar los grandes descuentos en intereses de mora de Impuesto Predial e Industria y Comercio, hasta el 13 de noviembre, es una excelente oportunidad para apoyar las finanzas de su municipio.
Su apoyo es fundamental para denunciar y desterrar las prácticas corruptas con los recursos de todos, porque cada esfuerzo por estar al día con su Municipio es valioso y nos permitirá, no solo pagar esta deuda de 30 años, sino recaudar cifras históricas y planear mucho mejor el gasto que con seguridad se reflejará en obras de impacto para el beneficio de todos. Unidos vamos a recuperar a Popayán.
