El contexto
Se trata de una nota periodística de hace casi ya cinco meses en el que Daniel Coronell en su espacio en La W Radio evidenció la identidad de las personas que utilizan el avión presidencial para realizar sus frecuentes viajes no justificados. En el que más resaltaba el nombre de Andrés Gregorio Duque Márquez, quien es el hermano del presidente Duque, así como de Rafaela Francisca Echeverri Correa, la hija del presidente de la junta de Ecopetrol.
En su nota titulada: “Los pasajeros frecuentes, y no justificados, del avión presidencial”, publicada el día 16 de noviembre de 2021, el mencionado periodista calificó de ‘Ejecutivo Platino’ a Andrés Gregorio Duque Márquez, al ya contar con más de un millón de millas voladas de este modo. Esto porque según lo que afirmó Coronell, el hermano del señor presidente no se pierde vuelo alguno. Tanto así que las listas oficiales de pasajeros de los vuelos presidenciales lo anotan como “Invitado Especial”.
Lo anterior no sería de extrañar, si el hermano del señor presidente actualmente tuviera alguna actividad laboral y oficial conocida con la Presidencia, pero según lo afirmó el periodista, el señor Andrés Gregorio Duque Márquez no la tiene. Sin embargo, allí no paran las sorpresas, resulta que, no es él el único beneficiario de estos viajes pagados con dinero de los contribuyentes. Sino que, a ejemplo a imagen y semejanza el señor Luigi Echeverri, el presidente de la junta de Ecopetrol y que ha posado como consejero del presidente de la República de Colombia, también se ha transportado con su familia en el avión presidencial. Él y su hija, quien responde al nombre de Rafaela Francisca Echeverri, han tenido actuaciones similares en el uso y el dinero de la Nación en este tipo de ‘beneficios’.
La respuesta actual de la Procuraduría sobre esta denuncia
Ahora bien, pues, en una respuesta obtenida hace un par de díasdesde la Procuraduría General de la Nación bajo Radicado No. S-2022-01730 al respecto sobre sus posibles actuaciones de esta denuncia de ya varios meses, admitió allí no tener conocimiento ni ningún tipo de registro en sus sistemas de datos sobre este tema. Así lo comunicó ese ente estatal:
“[...] una vez adelantada la búsqueda en la base de datos del Sistema [...] no se hallaron registros sobre interposición de quejas, peticiones o solicitudes, ni de iniciación de actuaciones de oficio de carácter disciplinario, preventivo o de intervención con los datos aportados [...]”.
Cabe aclarar que, los datos aportados fueron los legalmente correspondientes a la identidad tanto del hermano del presidente Duque como de la hija de Luigi Echeverry, Rafaela Francisca Echeverri Correa.
En el contexto del que millones de personas cayeron en la pobreza y las ya existentes la aumentaron por la pandemia puede resultar insultante u ofensivo en la opinión pública el hecho que durante tantas ocasiones se haya despilfarrado el dinero de los contribuyentes de manera descarada, innecesaria y repetitiva en este tipo de actuaciones tanto de los cercanos al actual presidente de la República como de la inacción por parte de la Procuraduría.
Esta conducta reiterativa deja en entredicho nuevamente, la eficiencia y transparencia con la que se deciden indagar o investigar ciertas actuaciones de las personas cercanas a los altos cargos públicos desde la Procuraduría General y que son expuestas a través de denuncias periodísticas. Recordando así casos como el del Ministerio de Defensa Diego Molano, que tampoco había comenzado a ser indagado disciplinariamente por este ente control a pesar de la denuncia de la Flip de octubre pasado hasta que el caso llegó por denuncia de un particular ante el despacho de un juez.
No obstante, quien escribe esta nota aquí ha instaurado una denuncia en la Contraloría por los mismos hechos para que sean investigados. En una respuesta preliminar, se notifica por parte de esa entidad que se ha asignado un funcionario para que investigue este caso y que la contestación producto de la misma será enviada el 22 de abril del 2022. Amanecerá y veremos.