Todo comenzó con una idea de Juan Carlos Echeverry. El exministro de Hacienda de Juan Manuel Santos ya había anunciado hace varios meses sus intenciones de aspirar a la Presidencia de Colombia, pero su candidatura no cogía fuerza. Ante este panorama, Echeverry puso sobre la mesa una alianza con los exalcaldes Enrique Peñalosa, Federico Gutiérrez y el exrector de los Andes, Alejandro Gaviria, en una unión a la que llamó Coalición de la Experiencia.
El nombre propuesto por Echeverry para la coalición cuajó de inmediato. Y es que en el pasado el exministro ya ha puesto remoquetes que han tenido una gran trascendencia en la realidad nacional. En 2011, cuando explicaba cómo debían repartirse las regalías en el país, acuñó el término “mermelada”. Pocos años después las investigaciones periodísticas demostraron que esa mermelada se convirtió en una repartidera de dineros públicos a través de los llamados “cupos indicativos” para aceitar las máquinas electorales de Juan Manuel Santos. Echeverry se decepcionó, manosearon su término.
La Coalición de la Experiencia comenzó a tomar forma cuando los exalcaldes se sentaron a conversar con el exministro. Gaviria no lo hizo, pues estaba recogiendo firmas, pero al mismo tiempo cargaba con el lastre del expresidente César Gaviria, que lo estaba apoyando bajo cuerda.
Era de esperarse que los exalcaldes se unieran en torno a la coalición. En ella también aterrizó Alejandro Char, quien ya había estado en conversaciones con Peñalosa y Gutiérrez desde inicios de este año, cuando su coalición era la de los exalcaldes. Sin embargo, esta nunca tuvo la fuerza suficiente, e incluso Char se bajó del bus electoral. Quien sí vio con buenos ojos la alianza fue Dilian Francisca Toro, la presidenta del Partido de la U, exsenadora y exgobernadora del Valle. Con esos cuatro nombres en la coalición las sumas de votos comenzaron a entusiasmar a más de uno.
Peñalosa en su segunda elección como alcalde de Bogotá sacó 900.000 votos; Gutiérrez en Medellín unos 250.000 votos; Toro para la gobernación logró 500.000 votos y Char tiene más de un millón de votos en toda la Costa Caribe. El único que no tiene votos es Echeverry, que nunca ha ejercido un cargo de elección popular.
Hace una semana también se les unió el senador conservador David Barguil, uno de los senadores más votados en las elecciones pasadas y que fue elegido por el directorio del partido como único candidato presidencial. Barguil es el que menos tiene experiencia dentro de la coalición, al único que la chapa de experto le queda grande, y su paso por el Congreso no parece ser suficiente. De hecho, las encuestas muestran que el problema de Barguil ni siquiera es una imagen negativa o una oposición dura, pues a través de su partido tiene casi dos millones de votos como base, sino que la gente no lo conoce.
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Óscar Iván Zuluaga, el candidato del uribismo que cargará con el gobierno fallido de Iván Duque
Nadie en las próximas elecciones tiene chances de llegar a segunda vuelta sin una coalición. Y eso lo tiene claro el Centro Democrático, que se le abrieron las puertas con la elección de Óscar Iván Zuluaga como su candidato presidencial. Zuluaga, el más moderado de los precandidatos, barrió en la encuesta interna a militantes y simpatizantes del uribismo. Y como era de esperarse, su entrada a la Coalición de la Experiencia parece inminente. Incluso antes de conocerse los resultados, Zuluaga se reunió con los exalcaldes.
El caldense de 62 años tenía la carta ganadora para la coalición de la experiencia. De hecho, si la elegida hubiera sido María Fernanda Cabal, su contrincante más fuerte por su radical discurso de extrema derecha, los exalcaldes, Echeverry, Barguil y Toro no le hubiesen abierto las puertas al uribismo. Pero el panorama ahora es distinto con Zuluaga en el tablero.
El candidato del uribismo tiene en su historial una base de 7 millones de votos que cosechó en 2014 cuando perdió las elecciones con Juan Manuel Santos. En ese entonces el expresidente Uribe y el recién creado Centro Democrático eran los electores mayores del país. Pero 7 años han hecho mella en su imagen. Uribe en aquel año contaba con una imagen favorable de cerca del 50% según la encuesta Invamer Poll, pero hoy tiene una imagen desfavorable del 66% y eso le puede costar a Zuluaga.
La Coalición de la Experiencia cada día coge más fuerza y se puede convertir en el gran contrapeso de Gustavo Petro y el Pacto Histórico. Las cartas están jugadas, son tres coaliciones; una de centro derecha, una de centro izquierda y una de izquierda. Y Zuluaga lo ha dicho con todas sus letras: él quiere hacer una coalición para gobernar, para ver qué hace con el país maltrecho que le dejaría Iván Duque.