El 15 de octubre (viernes), en la carrera Séptima con calle 72, a las cinco de la tarde en la ciudad de Bogotá y dos sitios o lugares públicos más de la capital del país, que aún están por precisarse, realizaremos el primer plantón nacional para reclamar al presidente Duque para que cumpla su palabra de ampliar la pista y modernizar el aeropuerto de Tolú.
Incluso informarán sobre la concretización de otros plantones que empiezan también a forjarse en otros departamentos donde colonias sucreñas tienen presencia notable.
Ya somos muchos los amigos de la causa de que Sucre tenga un aeropuerto moderno en el golfo de Morrosquillo; han propuesto esta interesante manera pacífica y tranquila de reclamarle al presidente Duque que honre su palabra, cumpliendo el pacto del golfo, que incluye la ampliación de la pista y la modernización del aeropuerto golfo de Morrosquillo de Santiago de Tolú.
El día del plantón solo lleváremos inflables que tendrán forma de avión, los cuales elevaremos agarrados de nuestras manos con una pita. También llevaremos avioncitos de papel.
Llevaremos pancartas alusivas al justo reclamo. No interrumpiremos el tráfico. Nuestro único estallido será el de nuestras gargantas soñadoras. Estaremos al lado del semáforo y solo cuando este cambie a rojo mostraremos con respeto las insignias de nuestro justo reclamo, para que el presidente Duque cumpla honrando su palabra, como decían nuestros abuelos. Nuestro único grito será "presidente Duque, cumpla el pacto". El respeto será el arma de nuestra grandeza pacífica.
Ante todo, bendito Dios, gracias por tanta solidaridad por una causa que abre las puertas a un nuevo vuelo a las nuevas generaciones de Sucre. Gracias a todos los amigos por las expresiones de apoyo. Gracias al periódico El Meridiano de Sucre por su incondicional apoyo en esta causa, a la compañía de publicidad exterior OP Publicidad por el precio especial de las vallas, pero ante todo y sobre todo, a ese despertar suyo, de todos, pues con su apoyo haremos realidad el sueño de todos. Gracias a usted. Gracias de nuevo por escuchar estos mensajes, por su despertar, por su apoyo.
El Dios de Colombia, que es el Dios de los sucreños y de todos, nos acompañará en este plantón pacífico, solidario, respetuoso, donde incluso desde ya clamamos el acompañamiento de nuestra policía nacional para dar ejemplo de comportamiento ciudadano.
El desequilibrio social nace del desequilibrio del Estado y el tratamiento desigual con que trata a las regiones. Nos merecemos respeto y tenemos el inalienable derecho de reclamar el bienestar y las obras para nuestra región.
¡Basta de mendigar! ¡Basta de contentarnos con migajas! ¡Basta de que nos trate tan inequitativamente...! Basta a que la paquidermias burocracia capitalina reaccione solo cuando tenemos el agua al cuello. ¡Necesitamos alzar vuelo! Nuestras nuevas generaciones piden pista a un nuevo devenir…. A un futuro distinto. Nosotros jamás podemos usurpar el espacio de las nuevas generaciones. El futuro le pertenece a ellas. Ayudarles en nuestra tercera edad a encontrar caminos menos tortuosos que los que nos correspondieron a nosotros es nuestra proclama, para devolverle con gratitud a nuestra tierra amada al menos algo de las alegrías y el orgullo que sentimos de haber nacido en Sucre.
Las nuevas generaciones deben apoderarse desde ya de ese mañana. Pisar en su territorio. Él, desde ya, ¡les pertenece en todos los sentidos...! Es fundamental ir tomando posesión del timón de nuestro departamento. Nosotros estamos retirados de toda ambición y así continuaremos hasta el último día que Dios nos otorgue. Dios grandioso y eterno nos dará la dicha de ver nuestros sueños y de ver posesionadas a las nuevas generaciones al mando del Sucre grande que todos merecemos.
¡Jamás claudicaremos en esta lucha por el aeropuerto de Tolú! Jamás desfallecemos… hasta encontrar que en nuestro despertar la realidad y los sueños coincidan. Hoy agradecemos también a Las2orillas, importante medio de comunicación nacional, por ayudarnos con sus divulgaciones y promoción de esta justa convocatoria para que el presidente Duque honre su palabra. ¡Con Dios venceremos!
