Es interesante observar que en las redes sociales cada vez que sale un artículo sobre el exprocurador muchas personas se pronuncian con gran desconocimiento aduciendo que la salida de Ordóñez de la Procuraduría fue por corrupción. Por eso me di a la tarea de explicar en “cristiano” su salida y desmentir a esos pasquines amigos de la corrupción que no hacen más que enredar al pueblo colombiano.
Para comenzar, cabe explicar que el doctor Ordóñez no fue destituido. La elección fue anulada, lo cual es totalmente diferente. Destituidos fueron los funcionarios corruptos como Petro, Piedad Córdoba, Samuel Moreno y muchos más, que sí cometieron crímenes. Al parecer, en el caso del exprocurador el crimen que cometió fue no ser un procurador de bolsillo como lo quería Santos.
Según decía el Consejo de Estado, la causa de la nulidad fue un nombramiento que hizo Ordóñez antes de ser ternado nuevamente. Esto, según la jurisprudencia anterior a esta sentencia era permitido. Por otro lado, la magistrada que votó a favor de Ordóñez se había declarado impedida, pero la corte no aceptó este impedimento ya que no representaba ningún riesgo en la elección. No obstante, el CDE en su obediencia a Santos cambió la interpretación para dar fin a la administración del exprocurador.
Es importante recordar que, un par de semanas antes de este fallo, se conoció públicamente que nuestro mandatario presionó a esta alta corte para “solucionar” el problema Ordóñez y Pretelt, dos opositores a su gobierno. Sería bueno preguntarle al “maravilloso” Consejo de Estado ¿por qué no anuló la reelección de Maya, actual contralor, ficha del gobierno Santos? o ¿por qué no se pronuncia contra la magistrada Lucy Jeannette Bermúdez, ya que su esposo tiene millonarios contratos con el Estado?
Desde la elección de Ordóñez, Santos siempre quiso sacarlo del camino para que no le pisara los cayos a su corrupto “Proceso de paz”. Lo sacó cuando más necesitamos al ministerio público, cuando no se respetó la voluntad popular del 2 de octubre, cuando se golpeó la democracia colombiana. Estamos seguros de que la salida de Ordóñez, más que un mal fue un favor, porque el pueblo colombiano sabrá quién fue su defensor y quién será quien los representará en un futuro.
