Tras la publicación en este espacio, hace tres meses, de la denuncia sobre el enorme desperdicio de icopor en la cadena Olímpica con los almuerzos que ofrece, su tienda de la calle 72 con carrera 13 hizo un tibio intento para que los clientes separaran algunos residuos plásticos.
Para tal fin, la tienda colocó tres improvisadas cajas de cartón para disponer ahí de los cubiertos plásticos, la pequeña bolsa plástica en que vienen envueltos y los vasos de plástico.
No obstante, los clientes les pararon pocas bolas y al poco tiempo la administración desistió del mediocre intento. Eso ocurre cuando este tipo de medidas correctivas no van acompañadas de buenas campañas de sensibilización, que expliquen bien el por qué y para qué del cambio de conducta para un consumo más responsable.
Este pobre intento no hizo sino confirmar el poco compromiso de muchos empresarios en Colombia, incluidos los directivos de la cadena, con la sostenibilidad ambiental y con una mejor gestión de residuos sólidos.
Hoy en día hay mucha información en internet e incluso cursos bilingües gratuitos en línea sobre el tema con prestigiosas instituciones educativas (por ejemplo, uno muy bueno en Gestión de Residuos Sólidos impartido por la Escuela Politécnica Federal de Lausana, Suiza), de modo que uno no se explica cómo tanto empresario que presume ser de vanguardia es tan ignorante en estos temas… vaya, ni siquiera nociones mínimas sobre desarrollo sostenible.
En el caso particular del icopor para comidas, es importante advertir que ni siquiera hay empresas que lo reciclen en Bogotá. Así que lo que la cadena Olímpica debe hacer ya es dejar de usar los mentados recipientes de icopor en los que sirve los almuerzos, que tanto contaminan, en lugar de recurrir a pañitos de agua tibia.
Los municipios de Iza y Nobsa en Boyacá, o más recientemente Guatapé, en Antioquia, han puesto ejemplo en Colombia de un verdadero compromiso conjunto de autoridades y comerciantes para poner freno a este problema.
Y esto aplica para todos los que aún utilicen el contaminante icopor para servir almuerzos. Cada vez hay más opciones más amigables con el ambiente, como platos y bandejas de cartón, bagazo de caña o fibra de fique.
Ya es hora de que la responsabilidad extendida de verdad se aplique en Colombia, donde sus autoridades en materia ambiental hablan pura paja y pecan de negligentes y falta de compromiso en estos temas.
Y usted, si es cliente frecuente de Olímpica a la hora del almuerzo, no siga siendo tan irresponsable con el icopor y lleve más bien sus recipientes reutilizables, que es una buena y sencilla alternativa. Es lo que se llama un consumo racional.