Una breve oda dedicada a los estudiantes y a los jóvenes que con tantas variables negativas resurgen y viven, reflejando mayor libertad.
Eso sí sin negar los desatinos políticos, económicos y sociales de un gobierno alejado de la realidad que cambia los hechos por palabras bonitas. Tampoco, el recrudecimiento de la violencia en Colombia.
Ahora bien, esta es una época en que cada vez identifico más jóvenes empoderados:
- Jóvenes que salen a marchar cuando consideran que sus derechos más elementales son vulnerados; algo que mi generación en promedio no hizo
- Jóvenes que se levanta temprano, van a sus trabajos y llegan por la noche a estudiar para mejorar su calidad de vida, pues saben que la educación es un posible vehículo para generar movilidad social.
- Jóvenes que no buscan nacer, crecer y morir.
- Jóvenes que no consideran tener casa, carro y beca, sino vivir.
- Jóvenes qu saben que donde nacieron es el principio y no el fin.
- Jóvenes que no enaltecen la institucionalidad, sino que la superan.
- Jóvenes que no buscan un trabajo sino un modo vida.
- Jóvenes que ven el mundo como un mar de posibilidades y no como una finalidad.
- Jóvenes que son capaces de hablar por ellos mismos.
- Jóvenes que no tienen héroes o líderes.
- Jóvenes que todos los días desarrollan su pensamiento crítico.
- Jóvenes que no conciben la maternidad como su eje de desarrollo sino como una posibilidad en su vida.
- Jóvenes que aman la vida y por eso están en contra de toda forma que la oblitere, la elimine.
- Jóvenes cada vez más conscientes de su impacto en el planta.
En efecto, esta es una generación con mayor grado de libertad. Ante tanto desasosiego, los aplaudo y los felicito. Gracias.