Desde marzo de este año hay una disputa por el territorio entre la disidencia Carlos Patiño y la Nueva Marquetalia de Iván Márquez, en el corregimiento de la Bermeja Baja, en Cauca. La pelea es por el cañón del Micay, un camino estratégico para trasportar armas y drogas.
En abril se dieron de nuevo enfrentamientos y se dio baja a seis miembros de uno de los grupos armados. En esa ocasión se vio afectada la vereda La Cabaña y varias viviendas resultaron incineradas. En mayo, vuelve y juega: nuevos combates dejaron muerto un civil y varios heridos.
Desde hace 15 días, el grupo Nueva Marquetalia volvió a las confrontaciones con la Carlos Patiño. El viernes 12 de agosto hubo un enfrentamiento y la respuesta de los entes gubernamentales fue dar ingreso a la Fuerza Pública, lo que ha agravado más las cosas. La orden es que el ejército saque de estas zonas a ambos grupos armados, sin importar el riesgo que corren las comunidades.
Hasta el momento hay un civil herido y varias casas destruidas por impacto de bala. Se han visto afectadas las veredas Naranjal, Limonar, Altamira, Cairo Alto, Cairo Bajo, Las Palmas, La Cabaña, el corregimiento Plan Grande, La Cocha, entre otros.
A pesar del fuego cruzado y el peligro que corre comunidad al salir de casa, la Alcaldía de Johnny Alexander Dávila Imbachi decidió celebrar la semana deportiva en el municipio, e incluso, hubo un concierto. Aunque están dando asilo a quienes se quedan sin casa, según una líder comunitaria, falta mayor visibilización de la disputa por el territorio en estos corregimientos.
Según un habitante del municipio, ya van varias casas con impacto de bala, los niños están traumatizados, se ha visto paralizado el transporte y se presentan minados en cultivos.
La comunidad solicita al gobierno departamental y nacional ayudas psicológicas y humanitarias.