Con la aparición del pop art durante la década de los años 50 con el colectivo de artistas llamado el Grupo Independiente y su efecto en esa misma década y la de los años 60 en Estados Unidos, explotó una ola estética que usaba elementos del cómic, la sátira y la publicidad.
Dos de los artistas más influyentes fueron Roy Lichtenstein y Andy Warhol. Sus obras tuvieron un impacto comercial que le dio otras miradas al arte de galería.
El uso de retículas modulares y colores neón le dieron un sello propio. Así mismo, la combinación de componentes vintage y el uso de elementos cotidianos crearon el concepto de lo kitsch.
Bajo ese contexto, aparece Butcher Billy, un artista brasilero que inspira su nombre en una anécdota familiar —en la que un antepasado suyo con origen irlandés, se ganó el apodo de “Butcher” por luchar durante la Guerra de la Independencia de Irlanda con un cuchillo— y traduce “carnicero”.
Su nombre de pila es Billy Mariano Da Luz, su personalidad es irreverente, crítica, ácida, como su propuesta plástica. Desde allí ha generado su estilo visual y narrativo, a tal punto de convertirse en uno de los artistas más populares de la actualidad.
Ha creado series de publicaciones gráficas mezclando la realidad y la ficción con mensajes de crítica política y cómic. Así, como la creación de series con artistas de rock con aspecto de superhéroes.
Define su estilo así: “Me gusta crear libremente, y luego darme cuenta de que las piezas de esa obra de arte están influenciadas por el humor de una película de Tim Burton, las pinceladas de una pieza de Salvador Dalí, con una banda sonora de un álbum temprano de David Bowie“.
Por: Oscar Forero Peña. Periodista cultural
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